Se trata de la pieza 31, un ‘cajón de sastre’ con diversos archivos, incluidas las microcintas del comisario.
El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha enviado un escrito a la Audiencia Nacional (AN) en el que anuncia que acudirá este miércoles a las 11.00 horas a la sede judicial para revisar el material expurgado que se ha ido acumulando en la pieza separada número 31 de la macrocausa donde se investigan sus negocios privados, denominada ‘Tándem’. «Se informa al tribunal que es voluntad de esta parte comparecer en la oficina judicial a fin de que se nos empiece a dar vista de lo actuado en esa pieza de expurgo», señala el escrito.
De esta forma, el policía retirado hace efectiva la resolución dictada el pasado 22 de diciembre por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que ordenó al juez instructor de ‘Tándem’, Manuel García Castellón, dar acceso a Villarejo a esta pieza 31.
Esta nueva pieza se creó hace un año como una especie de ‘cajón desastre’ para acumular en ella las denuncias y escritos que se remitían a la pieza principal sin guardar relación con la misma. Con el tiempo, también se ha usado para depositar el material expurgado de otras piezas, ya sea por no tener que ver con la macrocausa, contener datos que afectan a terceros ajenos a las pesquisas o hacer referencia a la información confidencial que Villarejo manejaba como agente de Inteligencia.
Entre todo este material se encuentran las microcintas que la Policía halló en una de las viviendas de Villarejo durante las entradas y registros de noviembre de 2017 con las que comenzó ‘Tándem’ y que albergarían información de los 70, 80 y 90 sobre asuntos como el golpe de Estado del 23-F, los GAL o ETA.
El pasado febrero, García Castellón acordó que la Unidad de Ciberdelincuencia de la Comisaría General de Información procediera a la digitalización de las microcintas, pero acotó su estudio a las copias que puedan tener documentación «relacionada directamente con los hechos objeto de investigación».
«SITUACIÓN DE INDEFENSIÓN»
Fuentes jurídicas consultadas indican que la intención de Villarejo es averiguar qué documentos conforman exactamente esta pieza 31, en aras a su derecho a la defensa. En un principio, Villarejo pidió personarse en esta pieza pero García Castellón se lo denegó. La Sala avaló esta decisión aunque ordenando al instructor que «dé vista de lo actuado» al comisario jubilado «en la oficina judicial y sin obtención de copias».
Para argumentar esta resolución, la Sala se hizo eco de un auto de la propia Sección Tercera en el que se establecía que el hecho de que no se diese traslado a una parte de lo actuado en una causa generaba una «clara situación de indefensión».
Los magistrados precisaron que Villarejo podrá formular «alegaciones sobre la posibilidad de excluir o limitar la publicidad en el presente procedimiento respecto de algún dato o documento con información sensible que pueda perjudicar a terceras personas, o de proceder a su expurgo y al de la información legalmente clasificada conforme a la legislación de secretos oficiales».