La ministra de Justicia está en modo ‘punk’ contra el propio Gobierno. Su paseo por la Feria de Abril no ha gustado nada ni en Ferraz ni en Moncloa debido a que lo ha programado en un momento en el que la justicia está patas arriba. Huelga de letrados, huelga de jueces y huelga de fiscales. Y todo ello con un Consejo General del Poder Judicial sin renovar. Pilar Llop ha dicho que está «muy por encima» de todo, en referencia clara a las críticas recibidas por irse a la Feria de Sevilla en plena crisis judicial. Desde el Gobierno destacan, sin embargo, que todo esto responde al cansancio generalizado que hay en el Ministerio de Justicia y a que Pilar Llop se ve fuera del Gobierno más pronto que tarde.
La ministra se siente traicionada por el Gobierno porque desde el Ministerio de Hacienda de María Jesús Montero no le han dado crédito (literalmente) para sofocar todas estas revueltas que pesan sobre su figura política. La salida de Llop tuvo que ver con la pasión de su marido y de su jefe de gabinete por la Feria de Sevilla. De hecho, la ministra deja que ambos, especialmente Rafael López, su jefe de gabinete, hayan urdido la estrategia fallida de encerrar a la ministra en el despacho cuando sonaba como posible candidata del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid o incluso de la Comunidad.
La huelga de jueces y fiscales ha dado la puntilla al futuro político de Llop. Pero que se haya revuelto completamente contra el propio Ejecutivo ha sorprendido en Moncloa. Pilar Llop ya no obedece al Gobierno al que pertenece porque entiende que le han traicionado al no darle presupuesto para sofocar las huelgas. La guerra aparentemente es contra María Jesús Montero, ministra de Hacienda que ha dicho directamente a Pilar Llop que no le dará presupuesto para acabar con un problema que afectará al PSOE a nivel electoral. Sin embargo, la ministra ha tomado la decisión de que, si está sola, no hará caso a las críticas. Las palabras del otro día en el Congreso dejan claro que ha entrado en modo ‘punk’.
La ministra de Justicia se ha pasado en la Feria de Abril unos días «fantásticos» que le han dado la puntilla a nivel político. Lo cierto es que fuentes del Ministerio de Justicia aseguran que Llop está muy cansada de las críticas y sobretodo que se siente completamente traicionada por los suyos porque le prometieron una candidatura en Madrid y al final le dieron la patada precisamente por no utilizar como debía la portavocía del Ministerio de Justicia. La ministra de Justicia sabe que ya no tiene ninguna posibilidad de seguir en el Gobierno y ha tomado la decisión de no obedecer las obligaciones que le traigan desde Moncloa. Tampoco es que importe demasiado la declaración que dio Llop en el Congreso, pero no ha gustado nada en Ferraz eso de que «está por encima» de esto.
La fiesta de Pilar Llop en Sevilla ha sido prácticamente una despedida. La ministra no tiene intención de apretar ni en la renovación del Consejo General del Poder Judicial, según detallan fuentes del ministerio, ni en la huelga de jueces y fiscales. No habrá interlocución porque Llop está «muy cansada» de cómo todos se han puesto de acuerdo para desgastar cada vez más su figura política. La ministra de Justicia se siente completamente traicionada por su propio Gobierno y por sus colegas de profesión. Tampoco es que en el CGPJ tengan una buena opinión de la ministra. La socialista dejará de serlo y solo tiene Madrid como posible salida.