Después de tres semanas de navegación por el Mar del Norte, la fragata “Blas de Lezo”, que ejerció las funciones de buque de mando durante la totalidad del ejercicio Formidable Shield 23, embarcando para ello a un numeroso estado mayor internacional, regresó el pasado sábado a su base en el Arsenal de Ferrol. Se trata del segundo año consecutivo en el que una fragata española de la 31ª Escuadrilla de Superficie actúa como buque de mando de este ejercicio.
El mayor ejercicio antimisil de la OTAN
Formidable Shield es el ejercicio conjunto (por implicar a fuerzas navales, aéreas y terrestres) y combinado (por participar en él varios países aliados), más exigente y de mayor relevancia en el ámbito de la defensa antimisil integral (IAMD Integrated Air and Missile Defense), en el ámbito de la OTAN. En él se ponen a prueba la estructura de mando y control y la capacidad de integración de las marinas de las naciones participantes en la defensa aérea contra diferentes tipos de amenazas de misiles.
A lo largo de tres semanas, los buques, aeronaves, y unidades de defensa basadas en tierra, han participado en una amplia variedad de ejercicios de elevado realismo y complejidad, diseñados para probar los sistemas de armas en las condiciones más demandantes. En el caso de la fragata española “Blas de Lezo” su participación en el ejercicio incluyó el lanzamiento de misiles anti buque y misiles antiaéreos contras blancos subsónicos e hipersónicos, así como el empleo de su artillería principal.
El buque de aprovisionamiento en combate “Patiño”
Por su parte, el “Patiño” ha proporcionado apoyo logístico a la totalidad de la flota desplegada para el ejercicio, que ha llegado a contar con hasta 23 buques de guerra. El apoyo del “Patiño” no se ha limitado únicamente al suministro de combustible, víveres y repuestos, sino que la disponibilidad de sus capacidades médico-sanitarias, ha permitido a la agrupación operar con seguridad en los escenarios extremadamente alejados y especialmente exigentes en los que se ha llevado a cabo el ejercicio, al Norte de Noruega y Noroeste de Escocia, llegando a cruzar el Círculo Polar Ártico durante la navegación. La presencia de un buque dotado de un hospital como el del “Patiño” permite a la flota navegar con la seguridad de que cualquier herido o enfermo grave podrá ser atendido en unas condiciones prácticamente equivalentes a las de un hospital de España.
A la conclusión del ejercicio, el buque logístico “Patiño” se ha incorporado a la Agrupación Naval Permanente número 2 de la OTAN (SNMG-2) con la que permanecerá navegando hasta el próximo 26 de junio, demostrando, una vez más, la altísima disponibilidad de los buques y las tripulaciones de nuestra Armada.
La “Blas de Lezo” en Lisboa
Tras completar el calendario de ejercicios en la mar, la “Blas de Lezo” se dirigió al puerto de Lisboa, en donde ha llevado a cabo un programa de actividades organizado por el Cuartel General de las Naval Striking and Support Forces de la OTAN (STRIKFORNATO). En primer lugar se ha celebrado una recepción oficial a bordo de la fragata “Blas de Lezo”, presidida por la embajadora de España en Portugal, Marta Betanzos. A continuación se ha llevado a cabo, en el Cuartel General de STRIKFORNATO, en Oeiras (Portugal), la conferencia de análisis de resultados del ejercicio Formidable Shield 23, desarrollado en las jornadas anteriores en el Mar del Norte, en la que se reconoció la notable contribución de nuestra Armada al ejercicio.
Ambas actividades contaron con la presencia de altos mandos de la OTAN, así como autoridades militares y embajadores de las naciones participantes en el ejercicio Formidable Shield 23.
El gran rendimiento demostrado por la fragata “Blas de Lezo” ha puesto de manifiesto, una vez más, las elevadas capacidades para la defensa aérea y anti misil de las fragatas de la clase F-100. Su sistema de combate de fabricación norteamericana AEGIS, y la fiabilidad que mantienen los buques tras veinte años de servicio en la Armada, gracias a un exhaustivo programa de mantenimiento, y sobre todo el alto nivel de alistamiento y de preparación de los hombres y mujeres que forman sus dotaciones, hacen de estas fragatas unas de las mejor valoradas de toda la Alianza, como demuestra el hecho de que se las designe en numerosas ocasiones como buques de mando de este tipo de agrupaciones navales de la OTAN.
La participación en este ejercicio de nuestra Armada, es una muestra del firme compromiso de España con la política de disuasión y defensa de la OTAN para garantizar la paz, la seguridad mundial y la legalidad internacional, además de fortalecer la imagen de nuestras fuerzas armadas en el contexto internacional.