En nuestra búsqueda constante por aliviar dolores y malestares, el ibuprofeno ha sido durante mucho tiempo una elección popular y fácilmente accesible. Sin embargo, detrás de su aparente inocuidad, diversos estudios científicos y autoridades médicas han lanzado repetidas advertencias sobre los peligros asociados con su consumo excesivo. A pesar de su amplio uso, muchos desconocen los riesgos asociados con este medicamento.
Desde problemas gastrointestinales graves hasta daños renales y cardíacos, sus efectos adversos pueden comprometer seriamente nuestra salud. Es fundamental que entendamos la importancia de un uso responsable de este fármaco y que busquemos alternativas más seguras siempre que sea posible. Descubre por qué, a pesar de su popularidad, puede ser el medicamento más tóxico que todos usamos.
6El consumo excesivo y el riesgo cardiovascular: efectos en el corazón y trombosis arterial

Su consumo excesivo puede tener efectos negativos en la salud cardiovascular. Aunque la enfermedad cardiovascular está relacionada principalmente con factores como el colesterol elevado, el tabaquismo, el sedentarismo y la obesidad, estudios han sugerido que el consumo prolongado y en dosis altas puede contribuir al desarrollo de estas enfermedades.
Se ha observado que altas dosis pueden aumentar el riesgo de eventos cardiovasculares, como ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Se cree que el ibuprofeno puede interferir en la función normal de los vasos sanguíneos, alterar la regulación de la presión arterial y promover la formación de coágulos sanguíneos en las arterias, lo que puede llevar a consecuencias graves para la salud. La Agencia de Medicamentos y Productos Sanitarios emitió una advertencia en 2015 sobre el consumo de dosis altas de ibuprofeno (2.400 mg/día o más), asociándolo con un mayor riesgo de trombosis arterial.