Júpiter destaca por algo más que por sus enormes dimensiones: el característico punto rojo de su superficie, conocido como la Gran Mancha Roja, de la cual cada vez se sabe algo más. Pero, ¿De qué se trata? La Gran Mancha Roja es una tormenta de dimensiones magnas, duplicando más o menos el diámetro de la Tierra.
Es un vórtice anticiclónico por definición, o lo que es lo mismo, una zona de altas presiones con un flujo circular, y no la cima de una montaña como se pensó en las primeras observaciones. Los últimos descubrimientos en torno a este fenómeno apuntan a que la mancha está en movimiento. Concretamente, los investigadores dividen la tormenta en dos partes, un anillo exterior y un anillo interior, de los cuales el primero continúa ganando velocidad con respecto a su contraparte interna.