El croissant es uno de los dulces más conocidos debido a su potente sabor, así como a su envidiable textura. Aptos tanto para disfrutarlos a la hora del desayuno como de la merienda, destacan por no dejar a nadie indiferente.
Una vez preparados, también cuentan con la virtud de poder degustarse de distintas formas, tanto dulces como salados. Si tú también quieres aprender cómo hacerlos para añadir un extra a tus recetas de postres, seguir estos consejos es todo lo que necesitas.
¿Te animas? Descubre el secreto para preparar los croissant más esponjosos y deliciosos.
3Derrite la mantequilla y corta la masa

Cuando tengas este primer paso dado, lo siguiente que debes hacer es derretir la mantequilla. Hazlo en el microondas colocándolo a potencia media y cuida que no se queme. De lo contrario, no te servirá para hacer la receta. A continuación, debes cortar la masa en triángulos alargados, lo que servirá como base para hacer los croissant. En este caso, la longitud que des a la base del triángulo es lo que marcará el tamaño que más tarde tenga el resultado final. Puedes jugar con tamaños diferentes.