Zapatero se «fuma» los brotes verdes: «El infinito es el infinito. El universo es infinito, muy probablemente»

Al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero no le está viniendo del todo bien la campaña electoral. Es uno de los que más se ha volcado en apoyar al presidente, Pedro Sánchez, pero viendo cómo ha evolucionado el discurso del socialista, flaco favor le está haciendo. El último discurso del expresidente del Gobierno es tan surrealista que más de uno ha dado por hecho que es un montaje, pero no lo es. En este último mitin, Zapatero parece haberse leído un libro de Carl Sagan para poco después haberlo mezclado con una pasión inesperada y emocional por la vida. En vez de hablar de economía, de pensiones o de vivienda, el exvicepresidente socialista ha hablado de la eternidad, de la vida, del concepto de infinito y de otras cuestiones filosóficas que poco venían a cuento.

“Somos el único sitio del universo, seguramente del todo, si es que podemos concebir el todo, donde se puede leer un libro y donde se puede amar”, ha asegurado el exvicepresidente en una suerte de discurso que bien podría haberse enmarcado en otros sitios. «Y todo ello en el universo, en lo infinito”, ha proseguido el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero. «Ese planeta, que es asombroso”, ha declarado a pocos días de la cita con las urnas. No todos han tenido claro por qué Zapatero ha lanzado este discurso, pero parece que en estos últimos días su apoyo a Sánchez no ha flaqueado hasta el punto de hablar del «infinito» con tal de intentar que su partido gane las elecciones del próximo 23 de julio.

«El infinito es el infinito. El universo es infinito, muy probablemente. No cabe en nuestra cabeza cómo es el infinito. Pertenecemos a una especie que es excepcional, que no la hay en ningún sitio del universo», ha declarado el exvicepresidente dejando absolutamente impresionados a todos los asistentes a su mitin electoral. Las palabras son tan surrealistas por parte del socialista, que más de uno en la oposición ha dado por hecho según ha visto el vídeo que no se trataba de algo real. Daban por hecho, incluso por el tono de voz, que se trataba de una burda manipulación con doblaje o de un viaje de la inteligencia artificial para jugar una mala pasada al PSOE, pero nada más lejos de la realidad.