Las promesas de Sánchez «obligan» a la Sareb a pagar sus deudas con las comunidades de vecinos

Antes de que Pedro Sánchez anunciara el adelanto electoral, uno de los principales pilares de la recta final de su legislatura estaba siendo su enfoque en las políticas de vivienda. Junto a la aprobación de una Ley con la que pretendieron hacer una regulación de este ámbito, el presidente del Gobierno promocionó su apuesta por el parque de vivienda pública, utilizando a la Sareb como herramienta principal para ofrecer «alquilares asequibles». En el acto del 16 de abril, Sánchez avanzó la aprobación de un plan destinado a que 50.000 viviendas de la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria se transfirieran a las comunidades autónomas para crear una oferta de alquiler público de viviendas. Sin embargo, para llevar a cabo este plan de traspaso, primero la Sareb tiene que sanear sus cuentas y pagar las deudas que tienen con las comunidades de vecinos donde tiene activos.

La Sareb no sabe cual es la deuda que tiene con estas comunidades. Ya en 2013, los vecinos de bloques en los que «el banco malo» había adquirido propiedades, como consecuencia de los desahucios de la banca, habían denunciado que el principal deudor del pago de la cuota de la comunidad era la Sareb. Ahora, como consecuencia de las promesas del aun presidente del Gobierno, la sociedad se ha visto «obligada» a sanear sus cuentas para hacer el traspaso de sus activos a las comunidades autónomas y ha activado un contrato por un valor de 4,8 millones de euros para averiguar cuanto dinero debe a estas comunidades y saldar sus deudas antes de que las administraciones públicas sean las nuevas propietarias.

En esta licitación que publicó la Sareb el 18 de julio en el Portal de Contratación Pública, la entidad bancaria advierte de su necesidad de contratar a una empresa que se encargue de «gestión de Comunidades de Propietarios, Entidades Urbanísticas de Conservación y Suministros». Esta sociedad bancaria invertirá casi 5 millones de euros no solo en el pago de deudas a comunidades de vecinos, sino también a la creación de nuevas comunidades en aquellos lugares donde estas no existan. Allí, la Sareb se presentará como «presidente de la comunidad» y gestionará toda la redacción de los estatutos y la creación de esta administración. Así, la Sareb necesita «la detección y localización» de las comunidades y la «gestión de los suministros» para cumplir con la obligatoriedad de sus pagos.

Los bancos, los grandes «morosos» de las comunidades de propietarios

Tal y como contó elDiario.es en 2013, ya entonces la Sareb no podía asimilar la gestión de los pagos y de la compra-venta por «falta de infraestructura», por lo que eran los bancos los encargados de esta gestión. Sin embargo, diez años después, el «banco malo» no se había hecho cargo de este procedimiento ya que solo pagan las deudas «cuando van a vender el inmueble», dejando impagos en las comunidades que se alargan desde que esta sociedad se convirtió en propietaria de estos activos.

Sin embargo, las entidades financieras tienen la misma obligación que cualquier persona física o jurídica de pagar los gastos correspondientes a la comunidad de vecinos a la que pertenece cuando se convierten en propietarias. Así consta en la Ley 49/1960, de 21 de julio, sobre propiedad horizontal y que además, desde 2013, verifica la obligatoriedad de no solo pagar los futuros cargos, sino también hacerse responsable en el caso de que existiera una deuda durante los tres años anteriores. Sin embargo, Blegal.eu asegura que «Existe la picaresca de algunas entidades bancarias que no inscriben en el Registro de la Propiedad el auto de adjudicación del inmueble, pero es nuestro criterio que eso no exime de la responsabilidad frente a la Comunidad del pago de dichos gastos»,

Ahora, tras 10 años en los que la Sareb no se había hecho cargo del pago de estas deudas, el cese a las comunidades autónomas de sus activos inmobiliarios ha supuesto un cambio en sus políticas. No solo ha licitado un contrato para hacer frente a esta deuda, sino que en el último año también ha hecho otros acuerdos en materia de desocupación de viviendas y de instalación de sistemas de seguridad conectados a una central receptora. Así, la Sareb ha iniciado un proceso con el que poner a punto estos inmuebles que el Gobierno de Pedro Sánchez ha prometido entregar a las comunidades autónomas, dentro de su plan de vivienda.