Mario Garcés (PP) se hace ‘ayusista’

El diputado del Partido Popular Mario Garcés ha sorprendido en Génova. Ha sido uno de los pocos que se ha atrevido a poner el grito en el cielo tras las elecciones generales debido a los movimientos dados por su presidente de partido, Alberto Núñez Feijoo. Desde un principio estuvo muy ligado al ala «galleguista» del PP, tanto con Mariano Rajoy como con el nuevo candidato popular, pero ahora se ha echado en brazos de los más críticos del partido y, según fuentes de Génova, se ha convertid en un «activista» de la candidatura de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Las últimas críticas lanzadas directamente a Feijoo no han gustado nada en el entorno del presidente, pero de momento no han tenido demasiadas consecuencias. Garcés sonaba para ser portavoz en el Congreso con Feijoo, pero ahora las cosas han cambiado considerablemente.

Mario Garcés fue secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad con el Gobierno de Mariano Rajoy y es secretario de Financiación Autonómica y Local del Partido Popular con el de Feijoo. Siempre ha sido un hombre de confianza del partido, pero sus últimas declaraciones han dejado completamente desubicados a los populares que aún creen en Feijoo, que siguen siendo la mayoría, tal y como cuentan fuentes del partido. Que ahora se haya lanzado al ataque ha hecho que más de una fuente confirme que Garcés se ha «convertido al ayusismo» a la espera de que un perfil más potente llegue a la presidencia del partido para que consiga eliminar esa dependencia (encima insuficiente) de Vox. Las palabras de Garcés han sido toda una declaración de intenciones que ahora le dejan en manos de un liderazgo entrante, pues fuente de Génova aseguran que se ha «enterrado políticamente» mientras Feijoo siga al frente del PP.

Más «molesta» en el entorno de Feijoo las palabras de Garcés si se enmarcan en un contexto en el que el presidente del partido contó con él como candidato para ser portavoz en el Congreso. No querían enterrarle, sino más bien promocionarle. Pero en el último momento, Garcés ha dado un golpe encima de la mesa. «El liderazgo consiste en que cuando tienes una cama, eres capaz de extender la manta a todos los lados de la cama. Lo que no puedes hacer es por la mañana es tenderla a la izquierda, al día siguiente a la derecha, cubrirme luego los pies y luego cubrirme la cabeza», ha asegurado en la televisión el diputado del Partido Popular. Estas declaraciones han sido leídas de otro modo tanto en el PP de Madrid como en Génova.

Son muchas las voces que coinciden en reconocer que Garcés se ha vuelto proclive a ese sentir general que se dejó ver en la noche electoral que pide que sea Isabel Díaz Ayuso la que se convierta en la candidata nacional del Partido Popular. Garcés no ha verbalizado su apoyo a las presuntas pretensiones de la presidenta de la Comunidad de Madrid (aunque hay que decir que Ayuso desmintió que estuviera planteándose un asalto a la cúpula del partido), pero lo cierto es que todos en el PP, tanto de Madrid como el nacional, le ubican ya en esa ola de políticos que piden un cambio (otro) en la formación para ver si así pueden desalojar a Pedro Sánchez de la Moncloa lo antes posible.

La presidenta de la Comunidad de Madrid se ha convertido en la obsesión de muchos populares, pero lo cierto es que el sentir de los barones del PP no es precisamente el mismo que el clamor popular que más se hace oír. Garcés no deja de ser un cargo «menor» dentro del PP en cuanto a peso político interno se refiere. Sin embargo, el diputado pertenece a una corriente que ignora en líneas generales que los demás barones populares podrían cortar las alas al ascenso de Ayuso, algo que repiten desde Génova cada vez que se recuerda que hay un movimiento importante para buscar cambios notables en el grupo conservador. Garcés, sin embargo, ha levantado todo tipo de alabanzas y críticas a nivel interno por una aparición que se ha compartido más de lo que le gustaría al propio parlamentario conservador.