Desde su estreno en 1995, Grand Prix se convirtió en un programa emblemático de la televisión española, dejando una huella imborrable en la memoria de millones de espectadores. El esperado regreso del concurso el 24 de julio emocionó nuevamente a la audiencia, quienes adoraban su emocionante competición y divertidas pruebas. Ramón García, con su carisma y calidez, fue el querido presentador que guio a los televidentes a través de emociones y risas durante gran parte de los años 90 y principios de los 2000.
Grand Prix se consolidó como uno de los programas más vistos a nivel nacional y se mantuvo en la parrilla televisiva durante 15 exitosas temporadas. Aunque Ramón García se convirtió en la imagen más icónica del programa, cabe destacar que no siempre fue el maestro de ceremonias. Desde sus inicios, contó con talentosas co-presentadoras como Jennifer Rope, Betty Liu y Virginia Chavarri, quienes también dejaron su impronta en el show. A lo largo del tiempo, otras destacadas personalidades se sumaron al equipo, enriqueciendo la experiencia televisiva y brindando momentos inolvidables a la audiencia.
1Trazando nuevas huellas: Bertín Osborne al frente del Grand Prix
Tras una breve pausa, Grand Prix regresó en el año 2007 de la mano de FORTA, con una nueva etapa liderada por el carismático cantante Bertín Osborne como presentador. Con su encanto y carácter cercano, Osborne se convirtió en el sustituto de Ramón García, guiando el concurso hasta el año 2009. Durante su labor al frente del programa, contó con la colaboración de Cristina Urgel y Natalia Rodríguez. Sin embargo, a pesar del talento y carisma de Bertín Osborne, los espectadores nunca pudieron olvidar a su maestro de ceremonias favorito, Ramón García, quien había dejado una huella imborrable en la historia de Grand Prix.
Aunque Osborne se esforzó y dejó su propia marca en el programa, la presencia del querido presentador original siempre estuvo presente en el corazón del público. El regreso de Grand Prix con Bertín Osborne como anfitrión fue un nuevo capítulo en la exitosa historia del programa, pero también sirvió para reafirmar la especial conexión que los televidentes tenían con el inolvidable Ramón García.
