Es una cuestión ideológica. Pero Sumar tiene claro que esa tendencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de seguir tendiendo puentes con Marruecos no es la más adecuada para el Sáhara Occidental. La presencia de Tesh Sidi como número tres en las listas de Sumar ya se ha visto como toda una declaración de intenciones. Pese a que las últimas informaciones del partido dejan claro que no exigirán, en principio, un ministerio para ella, lo cierto es que el partido de Yolanda Díaz ha querido dar un golpe encima de la mesa para que el nuevo Gobierno dé un giro de 180 grados en cuestión de política exterior. Desde Ferraz no quieren hablar del tema, pero lo cierto es que son conscientes de que habrá problemas si sale adelante el Gobierno de coalición.
Uno de los compromisos de Yolanda Díaz al integrar a una activista saharaui como Tesh Sidi fue el de revertir este reconocimiento oficial de Marruecos como soberano sobre el Sáhara Occidental. El Gobierno de coalición no dejará esta cuestión de lado. De hecho, desde Sumar tienen claro que darán la batalla en una cuestión que consideran de justicia y para la que tienen el apoyo de buena parte del arco parlamentario. Ese cliché de qué le debe Pedro Sánchez a Marruecos crecerá a medida que se acerque su investidura. La sola presencia en un puesto relevante de Tesh Sidi ya levanta ciertas críticas en el país vecino. Pero lo cierto es que Yolanda Díaz también levantará las críticas contra este acuerdo flamante que no ha contado con el consenso del Congreso de los Diputados.
La buena noticia para Sumar es que fuentes de Ferraz aseguran que buena parte del partido tampoco está de acuerdo con haber reconocido la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental. La presencia de Tesh Sidi fue un aviso a navegantes. Y la sobreexposición de la diputada más de lo mismo para una estrategia que tiene como objetivo condicionar las decisiones unipersonales del presidente del Gobierno. A todo esto hay que añadirle el contexto africano y las constantes revueltas de países vecinos que avivan la idea de una guerra entre Marruecos y Argelia. En todo este contexto ha entrado un partido como Sumar que quiere rehacer todas las relaciones internacionales con un país como Marruecos. Eso sí, con el apoyo del Partido Popular, de Vox y de todo el ala de Podemos.
El Sáhara Occidental es una cuestión de Estado, en la que España tiene mucho que decir, y que se ha visto dinamitada por la publicación de una carta de Pedro Sánchez al rey de Marruecos en la que se aceptaba que el país vecino fuera soberano. Esto, publicado después del encontronazo entre Arancha González Laya con Mohammed VI por haber acogido a Brahim Ghali, un líder militar del Frente Polisario, ha dejado una situación tan delicada como tensa. Ahora, con la inminente llegada de Sumar al Gobierno, si Pedro Sánchez consigue ser investido, habrá cambios en la política exterior hasta el extremo de que pueden volar los puentes tendidos entre España y Marruecos.
Fuentes de Sumar confirman que Yolanda Díaz espera tensar las relaciones con la sola presencia de Tesh Sidi en el Gobierno. Desde un primer momento, se planteó la posibilidad de que fuera ministra, pero lo cierto es que las últimas informaciones dejan claro que no será tan sencillo colocarla en el Consejo de Ministros precisamente por las complicaciones que traería en la política exterior. Aún así, desde Sumar esperan que su mera presencia pueda condicionar la política exterior en favor del Sáhara Occidental. El Gobierno de coalición tendrá nuevas connotaciones. Y no solo en materia de trabajo dado que Yolanda Díaz quiere poner su granito de arena en política exterior.