El hormigón fue inventado en el siglo XIX. Desde entonces, ha sido un material muy utilizado en la construcción. Actualmente, su vida útil puede sobrepasar los cien años, sin que ello suba el coste de su instalación. Los dos estados principales en los que se puede encontrar el hormigón son: el estado fresco o plástico, y el estado endurecido. El primero es el que permite manipular el hormigón para ajustarlo a los encofrados. Mientras que el segundo estado sucede una vez el hormigón ya ha adquirido su rigidez habitual, que lo protege de posibles fracturas. En cuanto a los tipos, hay varias clases de hormigón. En este artículo, nos centraremos en el hormigón impreso, que fusiona su característica funcionalidad con la belleza de las formas que pueden estamparse en él.
¿Qué significa exactamente hormigón impreso?
Los suelos de hormigón impreso se forman con losas de este material, que ha sido previamente estampado con moldes de neopreno. Estos moldes dejan en el hormigón la marca de las formas trazadas en ellos. De este modo, las losas de hormigón impreso pueden imitar otros materiales: piedra, pizarra, madera… Y, además, presentar también decoraciones más ornamentales, como formas geométricas y arabescos. Se trata, por tanto, de un hormigón muy estético, que puede colorearse y sombrearse. La sombra que se puede incluir hace que sus formas estampadas se vean más resaltadas, potenciando su relieve natural.
¿Cuándo se estampa el hormigón impreso?
Las estampaciones se realizan con el hormigón en estado plástico, cuando aún presenta cierta sensibilidad a la imprenta que se quiere dejar en el material. Previamente a estampar, como el hormigón es gris (por defecto), se le aplican los pigmentos del color deseado.
¿Dónde instalar suelos de hormigón impreso?
Aunque se puede incluir como pavimento en los interiores de los hogares, esto no es lo más habitual. Generalmente, el hormigón impreso se utiliza para zonas exteriores y en áreas urbanas: aceras, plazas… y, si se trata de construcciones interiores, en las zonas comunes de las urbanizaciones, en el área de la piscina, en zonas ajardinadas, en terrazas…
Aparte de utilizarse para suelos, también se puede emplear en las paredes. En este caso, sí es más factible su utilización en el interior de la vivienda. Se puede utilizar, por ejemplo, en las paredes externas de las bañeras.
Su resistencia a la humedad y al crecimiento de la maleza permite que se pueda colocar en zonas rurales y en piscinas. De hecho, como puede imitar acabados como el de la madera, hay quienes instalan suelos de hormigón impreso con efecto madera en el área que rodea la piscina. Las resinas transparentes que se utilizan en la fase final (cuando se aplica la capa de sellado) son resistentes a los cambios de temperatura, y la propiedad antideslizante del hormigón hace que su instalación resulte adecuada en una zona que va a mojarse con frecuencia.
¿Cómo mantenerlo en buenas condiciones?
Sólo es necesario, para mantenerlo en buen estado, su limpieza con agua y jabón neutro. Como con el resto de materiales, se desaconseja utilizar productos corrosivos que puedan dañarlo.
Hormigón impreso en Madrid
Entre las propiedades que hacen del hormigón impreso madrid el material fundamental en las calles de la ciudad, encontramos: su resistencia a la abrasión, su durabilidad frente al desgaste de los transeúntes y de los vehículos, y su fácil mantenimiento (lo que permite conservar su superficie limpia).
Respecto al precio, el hormigón impreso, en la Comunidad de Madrid, oscila entre los 23 y 29 euros por metro cuadrado. Su coste puede incrementarse según la dificultad que presenta el terreno de por sí, o el espesor requerido de hormigón. Normalmente, este espesor es de 10 cm para zonas peatonales. En áreas donde se espera la circulación de vehículos, el hormigón puede aumentar su grosor hasta los 15 cm.
Pavimentos Ibersol
Pavimentos Ibersol, con ubicación física en la Calle Alcalá de Henares, ofrece sus servicios en Madrid, Alcalá de Henares y Guadalajara. Es una empresa con una plantilla integrada por profesionales en hormigón impreso. También cuentan con especialistas en hormigón pulido, hormigón desactivado, mortero autonivelante, mantenimiento de hormigón, hormigón impreso vertical, y resinas epoxi.
¿Mejores suelos que los de gres?
El suelo de hormigón impreso está pensado para durar. Es un material que, además, resulta más económico que el gres, la baldosa o la terracota. En estructuras, al principio del artículo, se ha comentado cómo puede durar más de un siglo. En el caso de los suelos, como el desgaste es mayor al de la estructura, su vida útil se reduce, pero aun así sigue siendo una vida longeva: 20 años de media, y más tiempo si se le procura un buen mantenimiento; algo que Pavimentos Ibersol también puede proporcionar: el servicio de mantenimiento, para conservar el suelo de hormigón impreso en buen estado y lograr que dure lo máximo posible.