España, Portugal y Marruecos lograron la candidatura del Mundial 2030 tras una dura pugna con el resto de candidaturas, como Chile. No obstante, este Mundial 2030 será muy atípico, con una inauguración en Uruguay, con tres partidos en Montevideo, y una posible final en Marruecos. Y es que, el reino alauita ha exigido celebrar la final del torneo en Casablanca, en una ubicación aún sin construir.
De hecho, el Rey de Marruecos ha enviado un mensaje al Gobierno de España con la petición expresa de celebrar el torneo en Casablanca, según ha podido corroborar MONCLOA. Las únicas posibilidades contempladas hasta ahora pasaban por el Santiago Bernabéu o el futuro Camp Nou, dos estadios con más de los 80.000 espectadores que se exigen para un evento de estas características.
Marruecos ha pedido la celebración de la final con un proyecto, aún por construir, con una capacidad cercana a las 100.000 personas, semejante al del último Mundial de fútbol en Qatar, que se tuvo que jugar en invierno debido a las altas temperaturas veraniegas en el país de Oriente Medio. No obstante, el termómetro subirá también en Casablanca si finalmente el Gobierno accede a la petición marroquí.
MARRUECOS, SIN PROYECTO NI ESTADIO PARA 80.000 PERSONAS
España tiene numerosas posibles sedes, desde estadios de Primera con alta capacidad, así como los construidos para los Juegos Olímpicos y diversas competiciones, como los Juegos del Mediterráneo. Portugal también dispone de varias posibles sedes, como Lisboa y Oporto, más cuando ha organizado eventos similares como la Eurocopa 2004, con diez estadios renovados y de alta capacidad.
No obstante, Marruecos y el monarca Mohamed VI han irrumpido de forma feroz en esta particular lucha. No exigen un grupo o unas semifinales, sino la final, el partido con más espectadores y con mayor presencia publicitaria después de la Superbowl norteamericana.
Mohamed VI busca ahora su trozo del pastel
Celebrar la final supone un ingreso económico no sólo en cuanto al encuentro en sí, sino también en el sector turístico y ocio. Una inyección capital para el país vecino, que podría arrebatale la final a España como pago a la campaña para convencer a las distintas federaciones y organizaciones sobre las bondades del proyecto conjunto.
MARRUECOS SACA SU AS PARA PRESIONAR AL GOBIERNO DE SÁNCHEZ
Marruecos siempre se ha guardado su as bajo la manga a la hora de negociar. Dio el sí a España y Portugal para tener garantías de éxito en la promoción de la celebración en España, Portugal y el propio país, al tiempo que ahora busca su propia recompensa.
En el anuncio de la candidatura de España tan sólo los estadios del Real Madrid y del FC Barcelona, cuya presencia en la Champions League y en Primera División penden de una denuncia interpuesta ante la FIFA, tal y como ha publicado MONCLOA en exclusiva, cumplían los requisitos requeridos. De hecho, el Camp Nou lucirá su remodelación, con una capacidad de casi 100.000 espectadores y un complejo puntero en cuanto a oferta hotelera y zonas de ocio.
En Casablanca se ha puesto sobre la mesa un macroproyecto para hacer realidad el sueño de celebrar un Mundial con apenas infraestructuras. De hecho, en el reino alauita sólo se disputaría este único encuentro, por lo que tendría que tener capacidad tanto en vuelos como hoteles para apenas 100.000 personas, un número mínimo en comparación con la oferta de la fase de grupos previa.
El proyecto se ha desvelado este mismo jueves, un día después de que la candidatura conjunta obtuviera luz verde. Hasta ahora, tan sólo se ha disputado en África una fase final de un Mundial, en 2010. Todo queda ahora a expensas de la decisión de la FIFA, que podría suponer un fuerte mazazo para el turismo español.
MARRUECOS ELEVA LA TENSIÓN CON EL GOBIERNO
Habitualmente, Marruecos impone su criterio a la hora de pedir medidas para sí al Gobierno de España. Esta estrategia se registra desde hace varios años, cuando se elevaron las tensiones por la frontera de las vallas de Ceuta y Melilla. No obstante, la FIFA tendrá muy difícil otorgar dicha candidatura a Marruecos por la falta de infraestructuras y la disputa por la final en el Mundial 2030 está muy reñida entre el Santiago Bernabéu y el histórico centro del Barça, en detrimento de los independentistas, que no quieren ni ver a la Selección en un campeonato de canicas.
De esta forma, la «gran noticia» esperada por el Gobierno se transforma ahora en una nueva fuente de polémica. Este mismo miércoles, el presidente del Gobierno había asegurado que España, como organizador del Mundial 2030, tiene ante sí la oportunidad de demostrar la «fuerza del fútbol» español al defender valores como la «igualdad y competencia sana».
«Es una gran noticia y un gran orgullo la designación de España, Portugal y Marruecos para organizar el Mundial 2030. Demostraremos la fuerza del fútbol de nuestro país como campeones y campeonas mundiales, y defenderemos los valores de igualdad, solidaridad y competencia sana que deben acompañar al deporte», fueron las palabras escritas por Sánchez en Twitter, ahora llamada ‘X’.
