El consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes es un problema grave que pone en peligro tanto la salud física como mental de los jóvenes de hoy en día. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo excesivo de alcohol en la adolescencia se ha convertido en uno de los principales problemas de salud pública. El 70% de la muerte alcohol-relacionadas a nivel mundial se produjeron entre los jóvenes de 18 a 24 años, según datos recientes de 2016. Por tanto, urge abordar el problema para que los jóvenes no sean envenenados con el alcohol.
En los Estados Unidos y Europa Occidental, los jóvenes están entre los grupos más afectados por el consumo excesivo de alcohol. Según un informe realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el consumo excesivo de alcohol entre los adolescentes de los países miembros disminuyó ligeramente a partir de 2016. Sin embargo, el mismo reporte destacó que los adolescentes de EE. UU. y algunos países europeos aún se encuentran a la vanguardia de esta preocupación.
Índice
Ofrecer programas educativos:
Los gobiernos, las escuelas y otras entidades deben ofrecer programas educativos destinados a estudiantes de primaria, secundaria y universitarios. Estos programas deben ayudar a los jóvenes a comprender mejor cómo los problemas de salud relacionados con el consumo de alcohol se pueden prevenir y, al mismo tiempo, desmitificar los mitos que rodean a este tema. Estos programas educativos deben ser proporcionados no solo en las aulas sino también a nivel en línea, para llegar a más jóvenes.
Para prevenir que los jóvenes consuman excesivamente alcohol, los gobiernos, las escuelas y otras entidades deben establecer normas periódicas. Esto incluye leyes federales para limitar la compra y venta de alcohol a los menores de edad, prohibir la participación en festivales y eventos en los que se sirva alcohol a los adolescentes y la aplicación de políticas que impongan sanciones y castigos a los menores de edad que violen las leyes relacionadas con el alcohol.
El sector privado puede contribuir de manera significativa para abordar el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes. Esto incluye la fomentación de la participación de los jóvenes en actividades y proyectos saludables, la creación de aplicaciones y herramientas para mantener a los jóvenes alejados de las situaciones de riesgo relacionadas con el alcohol, y la educación a los padres sobre los riesgos de consumir alcohol.
Establecer controles:
Los controles sociales son una herramienta importante para limitar y prevenir el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes. Los miembros de la familia y los maestros pueden usarlos de la misma manera que los líderes comunitarios y empresarios. Estos controles sociales pueden incluir la creación de grupos de adolescentes no alcohólicos, el monitoreo de los patrones de comportamiento de los jóvenes, la educación de los padres sobre los problemas relacionados con el alcohol, y la discusión de los impacts negativos del alcohol de vez en cuando.
Además de los controles sociales, también hay que promover la ayuda voluntaria. Esto incluye la implementación de programas especializados para ayudar a los jóvenes a superar el abuso de alcohol, como las clínicas de tratamiento ambulatorio para el consumo excesivo de alcohol y otros tratamientos. Estos programas ofrecen consejería, orientación y estrategias asequibles a los jóvenes a fin de superar sus problemas.
La participación activa de los jóvenes es absolutamente necesaria para abordar el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes. Los jóvenes tienen que asumir la responsabilidad de tomar mejores decisiones cuando se trata de consumir alcohol. Esto incluye la toma de decisiones informadas sobre cuándo y cómo beber, el respeto de los límites de edad, y cómo evitar situaciones de riesgo relacionadas con el alcohol. Además, los jóvenes tienen que entender que el abuso de alcohol puede tener consecuencias fatales a largo plazo.
Promover la responsabilidad social y educación en salud:
La responsabilidad social y la educación en salud son una estrategia importante para prevenir la intoxicación por alcohol entre los jóvenes. Esto incluye promover el consumo responsable para que los jóvenes entiendan los riesgos del exceso de alcohol, la promoción de la salud basada en los cambios en el estilo de vida y el apoyo a las comunidades para impulsar la adopción de instrumentos de seguridad.
La educación es la herramienta más importante para abordar el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes. Los gobiernos, las escuelas y otras entidades deben promover la educación por medio de la creación de metas e informar a los jóvenes sobre el impacto a largo plazo de su conducta. Esto debe incluir información sobre el efecto psycho-físico de la intoxicación y los problemas de salud asociados con el consumo excesivo de alcohol.
Los mensajes de pro-salud son imprescindibles para desalentar el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes y animarlos a llevar una vida saludable. Estos mensajes pueden ser proporcionados por medio de carteles, folletos, anuncios de televisión, videos, etc. Será importante establecer un enfoque de liderazgo entre los jóvenes con el fin de promover estrategias saludables, estilos de vida saludables y la abstinencia de alcohol.
Aumentar la presencia de los profesionales de la salud:
Los profesionales de la salud son una parte integral de la estrategia para abordar el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes. Los profesionales de la salud deben ofrecer un consejo positivo para ayudar a los jóvenes a llevar una vida saludable, limitar el consumo de alcohol y prevenir los problemas relacionados con el alcohol. Es importante que los profesionales de la salud estén al tanto de las tendencias en el consumo de alcohol entre los jóvenes.
Los padres y otros miembros de la familia son responsables de la educación de sus hijos sobre el consumo de alcohol. Los padres y familiares deben ser informados sobre los problemas de salud relacionados con el abuso y las consecuencias legales del mismo. Deben estar conscientes de la manera en que el alcohol afecta el cerebro y el comportamiento de los adolescentes. Deben también hablar abiertamente con sus hijos sobre cómo evitar las situaciones de alto riesgo relacionadas con el alcohol, así como prestarles toda la atención, el amor y el cuidado necesarios.
Establecer zonas libres de alcohol:
Los gobiernos, las escuelas y otras entidades deben promover el concepto de áreas libres de alcohol para ayudar a los jóvenes a evitar el abuso y el consumo excesivo de alcohol. Esto significa prohibir la publicidad y la promoción del alcohol en todos los medios de comunicación y los establecimientos turísticos dominados por los jóvenes. Esto también significa la modificación del diseño y la distribución de los restaurantes y discotecas, de manera que los jóvenes no sean expuestos a la influencia del alcohol.
El consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes es un problema preocupante que amenaza con destruir la salud física y mental de las futuras generaciones. Por lo tanto, es fundamental abordar de manera eficaz esta preocupación. Esto significa que los gobiernos, las escuelas, las familias y otros sectores interesados tienen que trabajar juntos para impulsar las estrategias anteriores y otros programas destinados a limitar y prevenir el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes. Estas estrategias pueden ayudar a los jóvenes a mantenerse alejados de situaciones peligrosas relacionadas con el alcohol, a desarrollar habilidades para una vida saludable y a tomar decisiones informadas sobre el consumo de alcohol.
