Rufián activa el código rojo por el papel del Rey Emérito en el golpe del 23F

Rufián de ERC, Bildu y BNG han presentado una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados por la que solicitan que se proceda a desclasificar toda la documentación relativa al intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981. La iniciativa de los tres grupos nacionalistas se debe a las declaraciones realizadas este fin de semana por el golpista coronel Antonio Tejero, en las que aseguraba que el Rey Juan Carlos I había estado implicado en la intentona golpista.

La iniciativa de los tres partidos republicanos persigue que se debata en el Pleno del Congreso los sucesos y, sobre todo, que se esclarezca si el hoy Rey Emérito tuvo algún tipo de participación o no en el golpe de Estado dirigido por el general Alfonso Armada.

En una entrevista concedida al diario ‘El Español’, el coronel Tejero, que fue condenado por el asalto al Congreso, asegura que detrás del golpe estaban el Rey Juan Carlos I y el general Alfonso Armada. La razón era que querían «imponer un Gobierno a su gusto».

EL CORONEL ANTONIO TEJERO ASEGURA QUE «AL REY LO JODÍ VIVO»

Juan Carlos I envió un mensaje televisivo a los militares golpistas para que depusieran las armas
El Rey Emérito envió un mensaje televisivo a los militares golpistas para que depusieran las armas

El coronel golpista, además, se jacta en la entrevista de que fue él quien paró la operación diseñada por el monarca y el general al comprobar sus intenciones. El militar no mide ni sus palabras al asegurar que «yo al Rey Juan Carlos lo jodí vivo».

Ante estas declaraciones, ERC, Bildu y BNG no han dejado pasar ni un día, ya que sus afirmaciones con las realizadas en su día por el juez Joaquim Bosch, que en un libro explica precisamente lo mismo, que lo que frustró el golpe de Estado fue el rechazo del coronel Tejero a la lista de los integrantes del Gobierno de gran coalición que iría a presidir el general Armada.

Después de más de 40 años transcurridos desde el golpe de Estado, los diputados nacionalistas de ERC, Bildu y BNG consideran que «ya no existe justificación alguna para no conocer cada detalle de cada documento, grabación e información significativa que obre en poder del Estado español». Consideran que es necesario aportar luz sobre aquel episodio.

La única forma de desclasificar la documentación que solicitan es que el Gobierno aplique los cambios legislativos necesarios para proceder a su desclasificación y conocer con exactitud todos los hechos relacionados con la intentona golpista.

Casualmente los grupos que han presentado la proposición no de ley en el Congreso cuentan entre sus objetivos programáticos la república, o lo que es lo mismo, su rechazo a la monarquía. A ello se suma lasequivocaciones’ del Rey Emérito que se han descubierto en los últimos años, que le costaron su abdicación en su hijo Felipe VI.

EL 23F, EL DÍA EN QUE LA JOVEN DEMOCRACIA ESPAÑOLA FUE SACUDIDA

El 23 de febrero de 1981 ha quedado grabado en la memoria de España como el día en que se produjo un intento de golpe de Estado que puso a prueba la joven democracia del país. Aquel episodio, conocido como el 23-F, tuvo como epicentro el Congreso de los Diputados en Madrid, con algunas ramificaciones como en Valencia, y mantuvo en vilo a la nación entera. A continuación, se presenta un resumen de este acontecimiento histórico que marcó un antes y un después en la historia de España.

Para comprender el contexto del 23-F, es esencial remontarse a los años inmediatamente posteriores a la muerte del dictador Francisco Franco, que falleció el 20 de noviembre de 1975. Tras casi cuatro décadas de régimen dictatorial, su muerte abrió la puerta a un proceso de transición hacia la democracia. En 1977, se celebraron las primeras elecciones democráticas en España, y Adolfo Suárez se convirtió en el primer presidente del Gobierno de la democracia.

El período de la Transición, como se conoce a esta etapa, estuvo marcado por la elaboración de una nueva Constitución en 1978 y el establecimiento de un sistema democrático en el que se reconocieron los derechos y libertades fundamentales. Durante estos años, el país vivió una efervescencia política y social, con una creciente pluralidad de partidos y una sociedad civil comprometida con la consolidación de la democracia.

LOS PROTAGONISTAS DEL 23F

Para entender los sucesos ocurridos el 23-F, es importante conocer a las figuras clave involucradas. En primer lugar, Adolfo Suárez, que era el presidente del Gobierno en esos momentos. Artífice central de la transición y líder político que se marcó como objetivo la reconciliación y la consolidación democrática. Suárez gozaba de amplio apoyo en el Congreso y en la sociedad.

En segundo lugar, cabe mencionar a Leopoldo Calvo-Sotelo, vicepresidente del Gobierno, que asumió el cargo de presidente del Gobierno tras la dimisión presentada por Adolfo Suárez en enero de 1981. Su liderazgo estaba siendo sometido a presiones por las tensiones políticas y económicas del momento.

Y por el lado militar, las dos cabezas visibles del golpe de Estado fueron, Antonio Tejero, teniente coronel de la Guardia Civil. Tejero se convirtió en uno de los protagonistas del 23-F al irrumpir en el Congreso con un grupo de guardias civiles armados, tomando a los diputados como rehenes y realizando varios disparos al aire.

El ideólogo del golpe de Estado se atribuye al general Alfonso Armada, el militar que mantuvo contactos con políticos y fue considerado por algunos como un intermediario entre el mundo civil y militar en los días previos al golpe.

CÓMO FUE EL GOLPE DE ESTADO EL 23F

El 23 de febrero de 1981, el Congreso de los Diputados se preparaba para votar la investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo como presidente del Gobierno. Sin embargo, ese día quedó marcado por una serie de eventos inesperados que cambiarían el rumbo de la historia española.

El teniente coronel Antonio Tejero irrumpió en el hemiciclo del Congreso junto con un grupo de guardias civiles armados, interrumpiendo la sesión y tomando a los diputados como rehenes. La escena fue transmitida en vivo por televisión, y los ciudadanos españoles quedaron estupefactos al ver a los legisladores en el Congreso con las manos en alto y bajo la mirada de los golpistas, y refugiados bajo los escaños.

Mientras tanto, el general Alfonso Armada había mantenido contactos con algunos políticos de la época y se encontraba en una posición ambigua, aparentemente tratando de mediar entre los golpistas y el Gobierno legítimo. Esta incertidumbre generó un ambiente de confusión y tensión en todo el país.

El pueblo español desempeñó un papel crucial en la derrota del golpe de Estado. A lo largo del día, se produjeron manifestaciones en varias ciudades del país en apoyo a la democracia y en rechazo al intento de golpe. Los españoles se echaron a las calles en una muestra masiva de apoyo a las instituciones democráticas.

UN MENSAJE TELEVISIVO DEL REY JUAN CARLOS I HIZO DESISTIR A LOS MILITARES GOLPISTAS

Rufián presentó en el Congreso una iniciativa el 23 de febrero de 2021 para  revocar la inviolabilidad del jefe del Estado
Rufián presentó en el Congreso una iniciativa el 23 de febrero de 2021 para revocar la inviolabilidad del jefe del Estado

El Rey Juan Carlos I, en un acto histórico, se dirigió a la nación a través de la televisión para condenar el golpe y respaldar la democracia. Su mensaje fue clave para evitar una escalada de violencia y para que los militares implicados en el golpe desistieran de sus acciones.

El intento de golpe de Estado fue un fracaso. Las presiones tanto a nivel nacional como internacional, la reacción firme del Rey, la unidad de las fuerzas políticas en defensa de la democracia y el rechazo de gran parte de la sociedad española llevaron a la rendición de los golpistas.

El general Alfonso Armada, inicialmente ambiguo en su posición, jugó un papel importante al comunicarse con los golpistas y persuadir al teniente coronel Tejero de que se rindiera. La presión y la falta de apoyo llevaron a la desarticulación del golpe. Los diputados liberados regresaron al Congreso y continuaron con la sesión de investidura de Calvo-Sotelo, que finalmente fue elegido presidente del Gobierno.

El 23-F tuvo importantes consecuencias para España. En primer lugar, fortaleció la democracia y demostró la solidez de las instituciones democráticas y el apoyo popular a la Constitución de 1978. También se produjo un proceso de depuración en las fuerzas armadas para evitar futuros intentos golpistas.

En el ámbito político, el intento de golpe y la reacción firme de las fuerzas democráticas contribuyeron a la consolidación de la democracia en España. En años posteriores, se sucedieron gobiernos democráticos, se celebraron elecciones y se reforzó el sistema parlamentario.