La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Baleares celebra este viernes (09.45 horas) la vista previa al juicio contra un hombre acusado de agresión sexual continuada a un menor de 11 años de edad y exhibicionismo. La Fiscalía pide para el procesado nueve años y medio de cárcel.
Según el fiscal, los hechos se remontan a la primera semana del mes de abril del año 2018, en la casa de la abuela del acusado, quien aprovechó que el menor de 11 años de edad pernoctaba allí, al encontrarse su madre a punto de dar a luz, para cometer los ilícitos.
Al parecer, el hombre, movido por un ánimo libidinoso y valiéndose de su posición de superioridad derivada de la relación familiar existente entre ambos, por cuanto el procesado era el sobrino del compañero sentimental de la madre del pequeño en dichas fechas, el primer día de su estancia, el hombre, tras preguntar al menor si se tocaba, le obligó a ver pornografía infantil, hecho que repitió toda la semana, sin que el menor opusiera resistencia por el temor que le causaba.
Durante los días siguientes, según el ministerio público, el acusado se desnudó y masturbó en presencia del menor, llegando a despertarse éste, hasta en dos o tres ocasiones, con esperma en la cara.
El procesado, igualmente, y en varias ocasiones, añade el escrito del fiscal, obligó al menor a desnudarse y masturbarse delante suyo hasta eyacular, así como a masturbarle, amenazándole con pegarle, violarle o matar a su familia y amigos en caso de no obedecerle, por lo que éste accedió ante el temor que le pudiera causar algún mal y por la indefensión en la que se encontraba.
El fiscal precisa asimismo que, en el momento de los hechos, el procesado presentaba un retraso del desarrollo psicomotor así como retraso mental que afectaba notablemente a sus capacidades cognitivas y volitivas en relación al área sexual.
Los hechos previamente narrados son constitutivos de dos delitos de exhibicionismo continuado y uno de agresión sexual continuada, a los que responde el acusado en concepto de presunto autor. El fiscal cree que concurre la eximente incompleta de la responsabilidad criminal.
El ministerio público solicita una pena que suma nueve años y medio de cárcel, además de 10 años de libertad vigilada, más de cinco de inhabilitación y la prohibición de comunicación y aproximación al menor por un plazo de cinco años por el primer y el segundo delito, y por un plazo de diez años, por el tercer delito.
Finalmente, en concepto de responsabilidad civil, el fiscal pide que el acusado indemnice a la víctima con 15.000 euros por el perjuicio psicológico y daño moral sufrido.