Salvador Illa pone en la diana a los jueces para justificar la amnistía pactada por el PSOE con ERC y Junts. El líder de los socialistas catalanes tilda de «imprudentes» a los miembros garantes de la Justicia en España por sus durísimos comunicados contra la medida de gracia, de la que renegó antes de las elecciones generales y que ahora avala en un «nuevo cambio de opinión», que está siendo más habitual de lo esperado.
En una reinterpretación del texto firmado entre el PSOE y Junts, que los socialistas catalanes apoyan sin fisuras, Illa evita pronunciarse directamente sobre el ‘lawfare’ al asegurar que «no se trata de que el poder legislativo enmiende resoluciones judiciales». No obstante, ese término es el utilizado cuando existe una supuesta guerra judicial contra políticos, un término que ha firmado el PSOE en su acuerdo con Junts.
No obstante, el propio Illa mintió, tal y como le ha espetado Alejandro Fernández, líder del PPC esta misma semana en el Parlament, donde el líder de los socialistas ha bajado todos los brazos y ha abandonado su puesto como líder de la oposición. Y es que, apenas hay relatos contra los movimientos de ERC y Junts, sino un acercamiento cada vez más estrecho que podría dar lugar a cambios en el gobierno municipal de Barcelona, con la entrada de Junts en el Consistorio. Esta es una de las partes ocultas del pacto entre Junts y PSOE, a pesar de que los socialistas renieguen de ello.
ILLA Y LOS CAMBIOS DE OPINIÓN SOBRE LA AMNISTÍA
Y es que, si algo hace muy bien este socialismo catalán es decir una cosa y su contraria en cuestión de días o pocos meses. Este mismo año, el propio Illa aseguraba: «En Cataluña no habrá referéndum ni amnistía porque no lo quiere la mayoría». Una frase que ha modificado por aceptar no solo la amnistía sino incluir en la medida de gracia a sentenciados o enjuiciados por delitos tan graves como terrorismo, prevaricación y vínculos con el narcotráfico y blanqueo de capitales.
Si ha habido alguna resolución judicial que no ha sido afortunada y no se ajusta a los parámetros legales, tiene que ser el propio poder judicial con sus propios mecanismos quien investigue qué ha pasado
Pero Illa está más centrado en conocer las críticas a su medida estrella, que permitiría la vuelta de un prófugo de la Justicia, como Carles Puigdemont, sin haber pagado por sus delitos ni un solo día de prisión. El exministro de Sanidad, vinculado con polémicos contratos de compras de mascarillas durante los días más duros de la pandemia, llega a poner en duda las sentencias judiciales.
ILLA CRITICA LAS RESOLUCIONES JUDICIALES
«Si ha habido alguna resolución judicial que no ha sido afortunada y no se ajusta a los parámetros legales, tiene que ser el propio poder judicial con sus propios mecanismos quien investigue qué ha pasado y quien ratifique lo que se tenga que ratificar», ha asegurado. Como si las sentencias fueran revisadas sin la interposición de recursos de los afectados.
Los propios jueces han alertado de la ruptura de la separación de poderes en España, del desafío que supone dejar de rositas a los prófugos, como también de la creación de comisiones parlamentarias para desgranar autos judiciales. Todas, por primera vez en la historia de la Democracia, las asociaciones de jueces, el Consejo General del Poder Judicial, todas las asociaciones de fiscales, así como numerosos Colegios de Abogados, a excepción del de Barcelona (ICAB), han criticado y cargado tintas contra el pacto entre PSOE y Junts.
No obstante, el filósofo líder del PSC mantiene su «plena confianza en la solidez de la democracia española». De hecho, tan sereno y calmado está España que la amnistía ha provocado una ruptura total con el PSOE, cuyas sedes son los lugares escogidos para protestar.
ILLA TRASPASA SUS PROPIAS LÍNEAS ROJAS
Illa da ahora por hecha la investidura de Pedro Sánchez tras trocear los acuerdos, algunos de ellos incompatibles entre distintos grupos políticos. Ahora todo queda a la espera de la fecha para la sesión de investidura, que previsiblemente será a principios de la próxima semana, entre el 14 y el 15 de noviembre.
«Todos hemos escuchado políticos y dirigentes que creo que han ido más allá de donde al menos yo pienso que deben ir», ha asegurado. No obstante, el PSOE ahora es socio de quien rodeó el Congreso hace justo nueve años.
Según ha asegurado, la ley de amnistía ha pasado de ser inconstitucional y una línea roja a ser ahora la solución y el «reencuentro entre catalanes y con el resto de españoles». Todo por siete escaños, los de Junts, para poder sacar adelante una nueva legislatura. Además, asegura que el referéndum ya no es una línea roja, sino que es una vía defendible de cara a ser la mejor vía para Cataluña.
