¿Sueles posponer la alarma por la mañana? Así es como estás dañando tu salud

Lunes, seis de la madrugada, suena la alarma. Automáticamente le das al botón de posponer y te quedas en la cama «cinco minutos más». O puede que seas de estas personas que tienen programadas 10 alarmas con intervalos de 5 minutos. Aunque es una costumbre bastante habitual entre los que no tenemos más remedio que madrugar, los expertos coinciden en que posponer la alarma no asegura un mejor descanso. Y todavía hay mucho que desconocemos sobre los efectos reales de esta práctica.

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CÓMO EVITAR QUE SE NOS PEGUEN LAS SÁBANAS

Ya sea que prefieras las mañanas o las noches, enfrentes un día complicado o tengas el trabajo de tus sueños, es crucial levantarse a tiempo para gestionar eficientemente el tiempo y evitar el estrés adicional de las prisas.

  • Coloca el despertador o el móvil fuera de la habitación para obligarte a levantarte y apagar la alarma.
  • Opta por un despertador sin función de repetición, asegurando que solo se pueda apagar una vez.
  • Considera despertarte con noticias de la radio en lugar de una alarma para hacer el momento más agradable.
  • Actúa sin pensar demasiado; enfócate en arreglarte y desayunar en lugar de anticipar un mal día.
  • Escucha música animada mientras te vistes para darle un toque divertido al inicio del día.
  • Prepara la mesa del desayuno la noche anterior y deja listos la cafetera y otros elementos para ahorrar tiempo.
  • Elige la ropa y déjala lista en una silla la noche anterior para agilizar la mañana.
  • Practica técnicas de visualización para imaginarte levantándote con éxito desde el primer intento.
  • Si el insomnio te afecta, prueba técnicas de relajación muscular, como la de Jacobson, antes de dormir.
  • Bebe agua antes de dormir para despertar con la necesidad de ir al baño al sonar el despertador.
  • Asegúrate de que haya luz al despertar, como correr las cortinas, para facilitar el despertar.
  • Establece una hora para acostarte que permita el descanso adecuado y evita quedarte dormido en el sofá.
  • Crea una rutina agradable por la mañana, como hacer café, escuchar música y tomar una ducha caliente.
  • Celebra cada logro y siéntete bien al alcanzar tus metas matutinas.
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