El PP monetiza el «me gusta la fruta» de Ayuso

«Me gusta la fruta», «¿Qué pacha?» y «Me mola», las frases más virales de Isabel Díaz Ayuso en las últimas semanas, están dando mucho jugo al Partido Popular, que incluso ha lanzado una campaña de colaboración exclusiva para los afiliados con el fin de que luzcan los lemas de moda, recaudar fondos y, si cabe, exprimir más la paciencia de sus rivales políticos.

Isabel Díaz Ayuso ha destronado a Belén Esteban como reina de frases populares. A las célebres «Ni que fuera yo Bin Laden», «Andrea cómete el pollo» o «Hasta luego Maricarmen», las famosas coletillas que puso de moda la televisiva vecina de Paracuellos de Jarama, le han salido duras competidoras que son obra y gracia de la presidenta del Partido Popular de Madrid.

El partido que lidera Alberto Núñez Feijóo ha convertido la sorna de la líderesa regional durante sus discursos y enfrentamientos con adversarios en un negocio que tiene como inspiración sus últimas frases con retranca.

Isabel Díaz Ayuso, creadora de una de las frases más comerciales.
Isabel Díaz Ayuso, creadora de una de las frases más comerciales.

LA SORNA DE DIAZ AYUSO, NEGOCIO DEL PP

Su origen tuvo lugar en la tribuna de invitados del Congreso de los Diputados durante el debate para la investidura del presidente del Gobierno. Pedro Sánchez hizo referencia a la presidenta regional en varias ocasiones acusándole de posible caso de corrupción a ella y su familia e Isabel Díaz Ayuso, que no se pudo reprimir, emitió en alto, mejor dicho en forma de susurro, su pensamiento.

Las cámaras de los reporteros pillaron infraganti su reacción, un insulto claro y contundente que preferimos no repetir, aunque ya es sobradamente conocido. Por cierto, en Sálvame, el programa de Belén Esteban, también usaban un sustituto para el mismo término peyorativo para evitar sanciones durante el horario infantil de la audiencia y era: «hijo de hospital».

Como la política actual ha cambiado, el respeto a veces brilla por su ausencia. Lejos de recibir una regañina y de entonar el mea culpa para pedir disculpas, Isabel Díaz Ayuso y su gabinete salieron del apuro con el mejor humor posible, dadas las circunstancias. Al día siguiente la presidenta comparecía en la sesión de control del Gobierno de la Comunidad de Madrid e ironizó sobre cuál había sido su respuesta a regañadientes, la que se interpretaba por la lectura de sus labios.

«El presidente del Gobierno, con todo el abuso de poder, utilizó la tribuna de oradores en la casa de la soberanía nacional y aprovechó para difamarme a mí y a mi familia. A lo mejor ustedes, que ya tragan con todo, harían otra cosa, pero para mis adentros, sí, lo dije: me gusta la fruta. Si en una tribuna de oradores aprovecho e insulto a su familia lo mínimo es que usted diga por abajo: me gusta la fruta», se justificó en la cámara regional.

«A lo mejor ustedes, que ya tragan con todo, harían otra cosa, pero para mis adentros, sí, lo dije»

Su sorna no terminó ahí, pues hizo una relación de los insultos que había recibido en la Asamblea de Madrid que, si bien no se habían realizado a micrófono abierto, sí se pudieron apreciar a los responsable políticos cuando las hacían para sí mismos en situaciones similares a las que vivió Díaz Ayuso en el Congreso de los Diputados.

«La señora Mónica García hace poco dijo ‘mongola’ y yo no dije nada, porque entendí que decía ‘me mola’; el señor Javier Padilla hace poco dijo ‘facha’ y yo entendí: ‘¿qué pacha?’», subrayó Díaz Ayuso, como si la Asamblea de Madrid fuera el escenario del Club de la Comedia.

Tras ese discurso, la Real Casa de Correos, sede del gobierno madrileño empezó recibir cestas de frutas en agradecimiento por la publicidad de este producto tan saludable y característico de la dieta mediterránea, pues se recomienda comer al menos cinco piezas al día y variadas. Algunos tenderos corroboraron que se estaba vendiendo más fruta e incluso empezaron a salir camisetas y sudaderas con ese eslogan aprovechando el tirón mediático de sus palabras.

EL PP ESTIRA EL CHICLE DE LA FRUTA

Miembros del partido, como por ejemplo los concejales del PP del Ayuntamiento de Alcalá de Henares, no dudaron en mostrar durante la sesión plenaria ordinaria de noviembre en su Ayuntamiento envases con fruta pelada y troceada para el picoteo cuando tuvieran hambre, y sobre todo, en señal de apoyo a las palabras de su líder y gran amiga de Judith Piquet.

En la bancada de la oposición, Javier Rodríguez Palacios, portavoz y secretario general del PSOE municipal y flamante diputado del Congreso por la estrategia de cesión de actas de varios ministros socialistas, defendió a su jefe. Tras dos horas y media de sesión, dijo que lejos de sentirse insultados les recomendaba frutos rojos.

Rodríguez Palacios, que es un gran estratega, tiró de ironía, pues evidentemente no se refería a que comieran arándanos, frambuesas, fresas, fresones, cerezas, etcétera, sino que hizo una metáfora con los «cuatro años de frutos rojos» del Gobierno de coalición asegurando que los frutos rojos «son antioxidantes y combaten los radicales libres, lo cual es muy interesante en estos momentos, y evitan el envejecimiento y la degeneración como la que está pasando en su partido anquilosado y anclado en el resentimiento, así que cuatro años de Gobierno para España, mucha democracia, mucha libertad de la buena y progreso económico para todos los españoles». Con su frase el PSOE editó incluso un video para redes sociales donde proyectaba imágenes de las protestas y concentraciones en la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid.

Con posterioridad, Díaz Ayuso ha seguido bromeando con su ocurrencia y celebrando que algo tan propio de España como es la fruta se pueda convertir «en el regalo estrella de de esta Navidad».

Como siga así, es probable que algún despistado pueda creer que la tradición de celebrar la Nochevieja con fruta en España, con las uvas de la suerte al son de las campanadas de la Puerta del Sol -sede del gobierno autonómico-, sea consecuencia también de la jerga de Díaz Ayuso. Y es que el PP va a estirar al máximo el chicle de esta polémica, sobre todo para contrarrestar la promoción del PSOE y el libro de Pedro Sánchez ‘Tierra firme’, donde aprovecha para difamar a la presidenta de la Comunidad de Madrid.

EL PP USA UN LOGOTIPO DE MANZANA MORDIDA

Por todo ello, el PP ha lanzado una campaña exclusiva a sus miles de afiliados para que adquieran los productos que han elaborado con las frases de Isabel Díaz Ayuso. El eslogan viene acompañado de un logotipo curioso, una manzana mordida con los colores de la bandera española, como si el hecho de haber dicho eso a Pedro Sánchez fuese una tentación a la que no han podido resistirse, igual que Eva en el paraíso, según la Biblia.

Los afiliados pueden elegir desde camisetas unisex blancas con el eslógan en el pecho o a la altura del corazón en el lado izquierdo, por el módico precio de 25 euros y tallas desde la S hasta la 3 XXL, para cuerpos más voluminosos. Si bien hay una oferta: si compran dos, el pack sale por 40 euros. Los polos para hombres y mujeres son muy parecidos a las camisetas en color blanco para que destaque lo importante del mensaje, aunque en este caso cuestan unos 30 euros si los compran de forma individual y 50 euros si se llevan un par de ellos a la vez. Además, entre los souvenirs también hay tazas para el café del desayuno con el lema «Me gusta la fruta», «Qué pacha» y «Me mola». Asimismo, hay un superpack que incluye camiseta, taza y polo que cuesta 60 euros y otro pack de tres tazas por 35 euros.