La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha afirmado este miércoles que la petición de ayuda de la Xunta de Galicia «no se concreta todavía en nada particular, salvo una referencia general a que» el Gobierno central haga «esfuerzos para recoger los pellets en alta mar» tras el vertido.
«Cosa que, como el mismo consejero del Mar, Alfonso Villares, reconocía en la carta que envió a los ayuntamientos, es imposible por el tamaño de los pellets, salvo que hubiera bolsas de gran tamaño que se hubieran podido identificar», ha subrayado Teresa Ribera en una entrevista concedida a RNE.
En este sentido, ha remarcado que Salvamento Marítimo ha hecho ya «unos cuantos vuelos de reconocimiento, sigue las imágenes por satélite y no son visibles» y ha añadido que «muy difícilmente» se van a poder recoger en el mar. «Es prácticamente imposible», ha remachado, para después añadir que «hace ya semanas que las corrientes marinas las pueden haber llevado de un sitio a otro. Por eso, precisamente, la alerta no salta hasta que no tocan tierra. Es el momento en que se hace visible la aparición de esos pellets».
Sobre si el Gobierno ha tenido conocimiento de que la Xunta de Galicia haya formalizado ya el procedimiento de emergencia, Ribera ha dicho que el Ejecutivo ha sabido de ello «a través de los medios de comunicación, más que a través de una comunicación directa, que todavía» no ha recibido. No obstante, ha añadido que el secretario de Estado llamó ayer a la consejera de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, una vez que anunciaron que iban a decretar el nivel 2.
Respecto a si se han perdido días para actuar, la vicepresidenta ha afirmado que el 8 de diciembre el propio armador, la naviera, lanza un mensaje de seguridad para la navegación, indicando que un golpe de mar ha hecho caer contenedores y «lo pone conocimiento para que los barcos que están en la zona no se choquen con esos contenedores».
«Este es un aviso rutinario que procede del armador y es el que sirve de referencia para que cuando aparece ese material en las playas, se ponga de vuelta el mensaje y se pregunte si aquellos contenedores que aparentemente habían caído al mar contenían alguno de ellos ese material que está apareciendo en las playas, pero no es un mensaje dirigido ni desde Portugal ni hacia las autoridades españolas», ha manifestado.
Preguntada sobre las distintas versiones que mantienen el Gobierno y la Xunta en cuanto a la información que se ha ido suministrando sobre el vertido, Ribera ha contestado que «afortunadamente hay todo un tracking, toda una trazabilidad de cómo se van produciendo las comunicaciones desde el mismo día 13 de diciembre en el que el 112, el servicio de la propia Xunta, se comunica con las autoridades de Capitanía Marítima, de Marina Mercante, diciendo que hay particulares que están avisando de la aparición de esos pellets en las playas de Porto do Son y de Ribeira».
«Lo que echamos en falta es una reacción rápida de limpieza o una petición de colaboración para esa limpieza», ha declarado la vicepresidenta, al tiempo que ha insistido: «Una vez que está en tierra, la reacción inmediata debe ser recogerlo, recopilarlo cuanto antes, con todas las garantías y siguiendo las recomendaciones de los expertos».
En este punto, Ribera ha afirmado: «¿La Xunta lo puede hacer por sí misma? Fenomenal. ¿La Xunta requiere ayuda? Encantados de dársela. Yo creo que esto es el momento en el que estamos, el momento en el que lo que procede es trabajar todos juntos, porque hubiera procedido desde hace tiempo, pero evidentemente estamos a la espera de ver cómo desde la coordinación de la propia Xunta se pueden poner a disposición los medios de la Dirección General de Costas para la limpieza del litoral».
Asimismo, Ribera espera que «a lo largo de esta mañana» la Consejería del Mar y la Consejería de Medio Ambiente «puedan especificar la manera» en la que el Gobierno pueda contribuir a solucionar la situación. «Estamos todos a su disposición», ha remachado.
Preguntada sobre si tiene determinado el Ministerio dónde podría actuar en el caso de que Galicia pida efectivos en tierra, ha aclarado que esto es algo que «tiene que determinar la propia Xunta», que le tiene que orientar sobre cuáles son no solamente los municipios o las playas, sino el tipo de ayuda que echa en falta y que considera más prioritario para poder activar. «Mientras tanto, nosotros lo que hemos ido haciendo es organizar nuestros propios equipos, ir recabando material», ha indicado.
En cuanto a si puede haber problemas para las personas por el consumo de alimentos procedentes del mar, la vicepresidenta ha lanzado el mensaje de que «el mar no puede ser un vertedero». «En principio, todas las alertas, todos los protocolos de seguridad alimentaria funcionan con normalidad y no se ha enviado ninguna señal de alerta específica por parte de las autoridades de la Xunta», ha concluido.