La marea de microplásticos que ha llegado en plena precampaña electoral gallega a las costas de Galicia y de otras playas de Asturias, Cantabria, País Vasco e incluso las Canarias tiene muy preocupados al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, las administraciones regionales, ayuntamientos afectados, ecologistas y responsables de haber perdido dicha mercancía. Además, ya ha servicio de arma arrojadiza por parte de los partidos de la izquierda como PSOE, BNG y Sumar hacia el PP que gobierna la Xunta.
Ha pasado ya un mes desde que el pasado 8 de diciembre el mercante Toconao (bandera de Liberia – OMI 9627899), perdiera seis contenedores de su carga mientras navegaba en aguas portuguesas, a unos 80 kilómetros frente a Viana do Castelo. Uno de ellos contenía bolsas con el nombre de la empresa polaca Bedeko y, a priori, informaron que alrededor de 25 kilos de pellets microplásticos, los cuales llegaron dispersos a las rías gallegas como si fueran pequeños granizos.
La directora de logística de la corporación polaca, Urszula Hass, se desvinculó en El Correo Gallego de la propiedad de las bolsas que se han roto con las bolitas de plástico en su interior, pues son de una empresa india, y responsabiliza del accidente a la naviera Maersk, empresa de transporte asegurada con Zurich Insurance, como responsable de pérdidas o daños en las cargas, en caso de robos, desastres naturales o accidente en sus viajes.
CUÁNDO LLEGÓ LA MAREA DE MICROPLÁSTICOS
Al preguntar al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico por su participación y colaboración en la solución de este hecho, nos remitieron a la información proporcionada por la Delegación del Gobierno de Galicia, aclarando que fue el pasado 13 de diciembre cuando el Servicio de Urgencias 112 de la Xunta de Galicia alertó a Salvamento Marítimo que una persona había encontrado una bolsa de pellets de plástico en la costa.
A partir de esa fecha, dependiendo de las mareas, empezaron a llegar diferentes perdigones a las playas gallegas. Siguiendo el protocolo establecido, Salvamento Marítimo realizó las diferentes gestiones para encontrar el posible buque responsable. Además, realizaron salidas diarias con los medios aéreos y marítimos de Salvamento Marítimo para buscar más restos de perdigones de plástico, sin detectar nada en el mar, ni ellos ni los buques de la flota pesquera gallega, ya que es muy difícil detectarlos en el agua.
El 20 de diciembre, y como resultado del trabajo de investigación, el Centro de Salvamento Marítimo de Finisterre concluyó que el buque Toconao pudo ser el responsable de la llegada del pellet a las costas gallegas, enterándose así el Servicio de Guardacostas dependiente de la Consejería del Mar de la Xunta de Galicia, y se realizaron gestiones con la compañía naviera para confirmarlo. Era la segunda vez que supuestamente la Xunta tenía conocimiento del problema, pero el Plan de Contingencia Territorial para Contaminación Marina Accidental de Galicia (Camgal) no se activó.
La tarde del 20 de diciembre, los armadores se pusieron a disposición de la autoridades competentes para coordinar las acciones necesarias para la limpieza y recogida del material y el 21 de diciembre la Autoridad Marítima ya transfirió a los primeros Ayuntamientos afectados por los pellets la información del representante de la empresa naviera para que asuma los gastos. Cabe recordar que los primeros fueron Ribeira y Porto do Son y más tarde Muros, A Coruña, Oleiros, Outes, hasta la ría de Vigo. Hasta Asturias ha confirmado la llegada de microplásticos a playas como la de Castropol, Navia y Muros de Nalón.
Entre el 21 y 25 de diciembre Salvamento Marítimo no detectó más material en el agua, pero el día 26 Protección Civil localizó microplásticos hasta en el parque natural de Corrubedo. Fue la tercera vez -según indica la Delegación del Gobierno- que se informó a la Xunta, que siguió sin activar el Camgal, al igual que el día 27 de diciembre tras concretar y ampliar información con Protección Civil.
UN INFORME SOBRE MICROPLÁSTICOS A PORTUGAL
El 4 de enero, el abogado de los armadores estimó que el contenedor del accidente albergaba mil sacos de perdigones. Pero todavía no tenían pruebas de si el contenedor se hundió o no, por lo que no sabían la cantidad exacta de bolsas que componen el derrame. Respecto al contenido de los contenedores que cayeron al mar, desde el Ministerio se solicitó a autoridades portuguesas un informe que detallara a las acciones realizadas.
El 5 de enero la Xunta activó la fase de emergencia nivel mínimo (situación 1) del Plan Camgal. Y el 7 de enero la vicepresidente tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, llamó al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, para trasladarle la colaboración y ayuda necesaria para hacer frente a la llegada de pellets, y al día siguiente a Adrián Barbón, el presidente del Principado de Asturias, pues ya habían llegado pellets. La ministra aseguraba que la contaminación del océano y los ecosistemas marinos con plásticos es un enorme problema cuya solución requiere reducir drásticamente el uso de este material.
Desde el Ministerio de Teresa Ribera aclaran que la respuesta a una contaminación marina accidental que pueda afectar a aguas y costas españolas está regulado en el Real Decreto 1695/2012, de 21 de diciembre, por la que se aprueba el Sistema Nacional de Respuesta (SNR) a la contaminación marina. El SNR incluye dos subsistemas: mar y costa. En el mar la competencia es por completo desde el Estado, a través del Ministerio de Transportes (MITMA).
Este Plan cubre el ámbito marítimo y se activa cuando se detecta, pero en las distintas inspecciones realizadas por los medios aéreos y marítimos de Salvamento Marítimo no fue descubierto, ya que es un material plástico casi indetectable a altas temperaturas. Una vez que llega a las costas es competencia de la Xunta de Galicia retirarlo activando el Plan Camgal.
Respecto del Plan Camgal, la respuesta a episodios de contaminación marina es que se activa en primer lugar en el ámbito municipal, posteriormente en el ámbito regional y por último en el Estado, que sólo participa en la recolección activa de material en el caso de que la Comunidad Autónoma necesite apoyo para atacar la emergencia y active el Plan Camgal en la situación 2.
Desde el Ministerio hicieron hincapié en que el 5 de enero se recibió la comunicación en la Delegación del Gobierno en Galicia de la Junta de activación del Plan Territorial de Contingencia por Contaminación Accidente Armada de Galicia (plan Camgal). Este plan se activó por fase emergencia, nivel mínimo (situación 1). La activación del Camgal implica que a partir de ese momento (14.40 horas del 5 de enero) está en marcha el Plan MITECO Ribeira activado en nivel de alerta.
el operativo estatal está listo para actuar de inmediato
El Gobierno estaba a la espera de que la Xunta y demás administraciones regionales ejercieran su competencia y declararan una emergencia de nivel 2, solicitando formalmente la asistencia de medios del Estado, para poner a disposición todos los medios necesarios para la limpieza y retirada del material. «El operativo estatal está listo para actuar de inmediato», reiteraba la Delegación del Gobierno.
En cambio el presidente gallego, Alfonso Rueda, dijo que no es cierto que el Gobierno les avisara el 20 de diciembre de la llegada de los pellets de plástico a Galicia y criticó que la oposición le acuse de no actuar a tiempo. «Galicia está trabajando en la limpieza de las playas. Estamos a la espera de que el Gobierno nos de toda la información, tal y como le pedí a la vicepresidenta. Vamos a solucionar esta situación con todos los medios que sean necesario, con o sin su ayuda. Es cierto que estamos en período preelectoral, pero pido prudencia y responsabilidad a todos. No todo es campaña y confrontación. Lo importante es resolver y así se hará».
La unidad especializada en medioambiente de la Fiscalía General del Estado abrió diligencias por el vertido. El 4 de enero abrió un expediente de seguimiento y ahora ha abierto diligencias para comprobar las afectaciones del vertido y el origen para determinar si se ha cometido algún delito y quién sería su responsable.
Aunque el gobierno español instó al ejecutivo gallego a elevar la fase de emergencia en el nivel 2 para que un «operativo estatal pudiera intervenir inmediatamente», la consellera de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, lo había descartado, hasta el día 9 de enero que lo activó. Pidió que se hagan recogidas de los residuos «de forma ordenada», ya que si hay muchas personas recogiendo en la arena de las playas es fácil que «se pisen las bolitas y se entierren». Vázquez también aseguró que tenía previsto un dispositivo de 200 personas para limpiar las playas afectadas por el derrame e insistió en que estas pequeñas bolas de plástico «no son tóxicas ni peligrosas».
La consejera gallega también cargó contra el gobierno español porque «no fueron capaces de sacar los sacos del mar y están llegando al suelo miles de bolas». Vázquez dijo estar a la espera de que desde el Ministerio de Transición Ecológica les comunicaran qué servicios se pondrían en marcha para realizar frente a la situación.
estamos a la espera de que el gobierno nos de toda la información
El Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino de Galicia (INTECMAR), con sede en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) tampoco ha ofrecido explicaciones a MONCLOA, remitiendo directamente al gabinete de prensa de la Xunta de Galicia sin entrar a valorar lo ocurrido.
Mientras tanto, ecologistas, vecinos y mariscadores, ya han comenzado a organizarse para detectar dónde están llegando y retirar bolitas como granitos de arroz de sus playas, que no es fácil, ya que hay que hacerlo con los dedos minuciosamente o tamizando la arena de la playa.
REACCIONES POLÍTICAS POR LOS MICROPLÁSTICOS
Por otro lado, los partidos políticos de izquierda están haciendo fuerza para poner el foco de la responsabilidad en el PP, sobre todo para que no vuelva a ganar las elecciones del 18 de febrero. El portavoz de Sumar y ministro de Cultura, Ernest Urtasun, aseguró que su formación estaba estudiando denunciar a la Xunta de Galicia por «inacción» tras el vertido de plásticos, y Marta Lois, la portavoz en el Congreso, confirmó la presentación de la denuncia ante la jurisdicción contenciosa administrativa.
Tanto ellos como el PSOE gallego creen que se ha ocultado información. El socialista José Ramón Gómez Besteiro criticó que «una vez más el PP actúa sólo por presión social y quiere pasar su responsabilidad a los ayuntamientos (…) Se fueron de vacaciones sabiendo lo que iba a pasar», se queja. Desde el BNG (Bloque Nacionalista Galego) piden que se eleve el nivel de alarma para poner todos los medios necesarios para la retirada de estos pellets. Ana Potón subrayaba que «un mes después es hora que los gallegos tengan información veraz y contrastada». De hecho, tanto las Juventudes Socialistas como el BNG han sido acusados de utilizar fotografías falsas de microplásticos en grandes cantidades o en la boca de algunos peces para hacer campaña contra la Xunta.
un mes después es hora que los gallegos tengan información veraz y contrastada
El portavoz del PP y vicesecretario de Cultura de la formación, Borja Sémper, ha denunciado este lunes la «falta de información y lealtad institucional» del Gobierno de Pedro Sánchez con la Xunta de Galicia que dirige Alfonso Rueda. «No es serio y no es responsable que haya partes del Gobierno que estén asignando responsabilidades a un Gobierno autonómico en una materia sobre la que el Gobierno de España es absolutamente competente», ha declarado Sémper, aludiendo a los antecedentes que hay y en una referencia velada al ‘Prestige’, el buque petrolero que tuvo un derrame en noviembre de 2002.
En esta ocasión parece menos grave la contaminación del vertido para la naturaleza, ya que el gránulo no es un producto tóxico, se utiliza en la producción de productos que entran en contacto con alimentos. No obstante, fuentes de Greenpeace aseguraron que los efectos del vertido de microplásticos en las costas gallegas serán «terribles» y que los daños en el ecosistema «durarán muchos años». Además, la organización SEO/BirdLife también ha advertido que estos materiales pueden afectar negativamente las aves marinas. Un informe de Bruselas también apuntó la toxicidad de no eliminarse y acumularse en peces y moluscos.
En esta polémica tampoco podía falta el ministro de Transporte, Óscar Puente. El vallisoletano dijo haber actuado en todo momento siguiendo escrupulosamente las prescripciones técnicas que hay en esta materia. Reprochaba al consejero gallego que hubiese informado a los alcaldes de los municipios afectados en el noroeste de España que por sus características no resultaba posible la retirada de este residuo en el mar y, en cambio, después le pidiera a él «la séptima flota y un submarino», afirmó con sarcasmo en su cuenta de X.
Según Óscar Puente, el Gobierno, dentro de sus competencias, ha hecho y hace el seguimiento vía satélite y con vigilancias aéreas, pero los microplásticos no se puede detectar ni hacer nada en alta mar. En Canarias, Salvamento Marítimo si lo ha hecho al activar la prealerta de emergencias tras localizar microplásticos en la costa de Tenerife.
La Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias ha establecido un sistema de vigilancia en el que Salvamento Marítimo se va a encargar de localizar y recoger en alta mal este material para evitar que llegue a su costa, pues existe mucha preocupación de que con el temporal se rompan más sacos y se desparramen más bolitas. La última hora del caso la dio el País Vasco, donde creen que los microplásticos encontrados en sus playas no corresponden a la misma carga del vertido que llegó a Galicia, sino de algún otro accidente anterior.
