El Congreso del PSPV-PSOE se celebrará del 22 al 24 de marzo en Benicàssim, pero las primarias para la elección del nuevo o nueva secretario general se celebrarán el 25 de febrero en primera vuelta y el 3 de marzo si fuera necesaria una segunda.
Así lo ha anunciado el secretario general, Ximo Puig, en una rueda de prensa posterior a la Comisión Ejecutiva Nacional (CEN), donde ha resaltado que este calendario lo debe refrendar el Comité Nacional de este sábado, y ha reconocido que las elecciones gallegas han hecho que este cónclave se retrase.
Puig ha señalado que este quiere ser un congreso «abierto a la ciudadanía» y ha resaltado la importancia simbólica de Benicàssim para los socialistas, al ser esta ciudad donde se acordó el Estatut d’Autonomia.
En concreto, la presentación de precandidaturas se podrá realizar el 29 y 30 de enero, del 31 de enero al 7 de febrero se recogerán avales y ese mismo día se proclamarán las candidaturas. La campaña será del 9 al 23 de febrero y se votará el domingo 25. El 3 de marzo se votaría en caso de necesitarse una segunda vuelta y el Congreso en sí se celebrará pasadas las Fallas y la Magdalena, del 22 al 24 de marzo.
Puig ha apostado por «revigorizar el proyecto socialista con un congreso abierto y socialdemócrata» y ha defendido que «el partido tiene que salir profundamente unido y preservando la diversidad». Además, ha explicado que «a finales del mes de marzo celebraremos un congreso abierto a la ciudadanía que nos permitirá reforzar la propuesta socialista y llegar a 2027 siendo la alternativa fuerte que necesitan los valencianos y valencianas».
El secretario general ha señalado que «nunca estará decepcionado» si no se consigue una candidatura unitaria al Congreso Extraordinario y ha señalado que no descarta que se pueda producir. Sin embargo, ha expresado su deseo de que este sea un proceso de primarias «en positivo» y ha subrayado que «no se pueden repetir los errores del pasado».
«PARTIDO UNIDO»
El secretario general ha rechazado posicionarse con ningún posible candidato y ha indicado que el partido «no tiene por qué» salir desunido de este proceso de primarias. En este sentido, ha incidido en la necesidad de que el PSPV «tenga la vocación de gobernar y servir a la mayoría social» y que sea un espacio «competitivo» y «necesario para ser la alternativa en la Comunidad Valenciana».
En este sentido, ha señalado que el partido debe «salir unido» y que han pasado «momentos mucho más difíciles». «Ahora estamos en un momento razonablemente positivo, no estamos gobernando así que no podemos decir que positivo porque sería un triunfalismo improcedente, pero avanzar 10 puntos en los últimos años suponen unas garantías de poder mirar más allá y ser la alternativa que necesita la Comunidad Valenciana», ha añadido. Así, ha señalado que el 30% de los votos «no tiene que ser ni un suelo ni un techo».
Igualmente, ha señalado que durante el proceso congresual los y las socialistas continuarán «mirando hacia fuera y fiscalizando la labor que se está haciendo desde el gobierno de la Generalitat» y ha agradecido «a compañeros, compañeras y a la sociedad valenciana el apoyo que me habéis dado durante todos estos años al frente del proyecto».