Las sospechas se ciernen sobre UNRWA y su supuesta financiación y colaboración con el grupo terrorista Hamás. Al menos doce trabajadores de la ONU -nueve de ellos despedidos y otro ha fallecido-, pertenecientes todos ellos a UNRWA, centrada en dar cobertura a los necesitados en la Franja de Gaza, habrían participado en el ataque a Israel del pasado 7 de octubre. Es la mayor masacre de judíos desde el Holocausto y las principales potencias mundiales no han esperado al resultado de la investigación para cortar todo vínculo económico con UNRWA.
El propio Estado israelí ha dado la voz de alarma sobre la presunta vinculación de esta organización humanitaria y los terroristas de Hamás y tan solo una semana después de que Josep Borrell, el alto representante de Política Exterior de la UE, haya asegurado públicamente que Israel habría financiación a los terroristas para acabar con la Autoridad Palestina, la facción más moderada y que controla la parte de Cisjordania.
Borrell no aportó prueba concreta para corroborar su durísima acusación, a pesar de la responsabilidad del cargo, y llegó a acusar a Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí, para boicotear «personalmente» cualquier intento de resolver el conflicto entre ambas fuerzas. Todo ello, tras ser investido Doctor Honoris Causa por la Universidad de Valladolid.
«La mala noticia es que Israel, y en particular su gobierno, se niega en redondo a aceptar una solución (de dos Estados) que él personalmente ha estado boicoteando durante los últimos 30 años», afirmó. Todo ello, para defender la solución de creación de dos países independientes.
LA UNRWA PERCIBE 1.100 M€, PERO LA UE SOLO INVESTIGA
A raíz de esta denuncia, Estados Unidos, Reino Unido, Finlandia, Países Bajos, Austria, Japón, Alemania e Italia han cortado el grifo a la espera de que conocer todas las conclusiones de la investigación sobre UNRWA, centrada en los refugiados palestinos, y fundada tras la creación del Estado de Israel, en 1949. Este es el punto de partida de España para tratar de imponerse como árbitro ante esta guerra iniciada por Hamás.
El ente de la ONU percibe 1.100 millones de euros anuales, un montante que se reducirá drásticamente tras la pérdida de apoyos. El 75% de los palestinos que viven en Gaza dependen de la ayuda de la ONU para poder subsistir. El dinero de los países participantes en esta misión se destina a ayudas sanitarias, educación y alimentos, repartidos entre más de 13.000 trabajadores. En total, UNWRA gestiona 58 campos de refugiados en Oriente Próximo.
El material entregado por UNWRA se ha utilizado para fabricar armamento, tal y como ha denunciado Israel con pruebas en la mayor parte de las ocasiones. Asimismo, toda esta ayuda pasa directamente a la cúpula de Hamás, que la gestiona a su antojo, una fórmula para mantener controlada a la población, así como su reacción. De esta forma, Hamás acusa a Israel de bloqueos permanentes y de dejar morir de hambre a los habitantes de la Franja de Gaza.
VINCULACIÓN ENTRE UNWRA Y HAMÁS
La vinculación directa entre Hamás y UNWRA se mostró en el informe Takkenberg en 2018. En el estudio se mostraron las estrechas relaciones entre terroristas y personal de la ONU, en un sistema basado en la corrupción como modelo económico, donde los suministros están sometidos a los cuellos de botella de Hamás.
Ante esta situación, varios países europeos, España y Francia entre ellos, han evitado cortar la financiación a UNWRA. Para el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se trata de una agencia «indispensable» para aliviar la «terrible catástrofe humanitaria» en Gaza. En este sentido, ha destacado que España «no modificará su relación» con la misma, pero «sigue de cerca la investigación interna» por la vinculación con el ataque del 7 de octubre.
los palestinos tenían derecho a defenderse
Albares, además, insiste en comparar la respuesta de Israel al ataque de Hamás como una «terrible catástrofe humana» y culpa de todos los males a Netanyahu al registrarse más de 26.000 muertos y más de un millón de personas acorraladas.
EL GOBIERNO INSISTE EN DAR AYUDAS A UNRWA
Ante esta situación, España ha incrementado la ayuda desde los 20 a los 50 millones de euros desde el ataque de Hamás en territorio israelí. «No podemos resignarnos a seguir viendo más mujeres, hombres, niñas y niños inocentes muertos en Gaza», ha aseverado Albares.
El Gobierno de España ha puesto al mismo nivel a los terroristas de Hamás y a Israel, condenando «todo tipo de violencia» y evitar vincular al gobierno de Gaza con el terrorismo. Desde la parte de Sumar, liderada por la vicepresidenta segunda del Ejecutivo y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, apuntaban tras el ataque del 7 de octubre que «los palestinos tenían derecho a defenderse», una justificación del ataque que dejó 1.159 muertos y más de 242 secuestrados, cuyo paradero se desconoce.
Para la televisión catalana TV3, fue el «ataque más audaz» de Hamás contra Israel. El director del medio público no solo justificó esta definición al terrible crimen de Hamás, sino que llegó a sentirse satisfecho con la información emitida en directo.
