Planas descarta la competencia desleal y califica los ataques de los agricultores franceses de «inadmisibles»

Luis Planas, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha respondido dos días después al primer ministro francés, Gabriel Attal, que «no hay ninguna ventaja competitiva» para los agricultores españoles, pese a que Attal se mostró convencido este sábado que la competencia desleal existía por parte de países de la Unión Europea, como España o Italia. Planas ha confirmado que está en contacto con las autoridades francesas: «En los últimos días, hemos intercambiado algún mensaje de forma directa y también de forma indirecta a través de nuestros equipos y la embajada en París está también en contacto permanente».

Planas ha afirmado con rotundidad que «estamos en la Unión Europea y, por tanto, las normas de producción de comercialización son similares en todos los países miembros y todos los países miembros las aplicamos igual. Así que no hay ninguna ventaja competitiva derivada por la aplicación de normas distintas». También ha insistido en que «las mismas reglas que se aplican en Francia, se aplican en Alemania, en España, en Portugal, en Italia, en Holanda y en el resto de los Estados miembros».

«Las mismas reglas que se aplican en Francia, se aplican en Alemania, en España, en Portugal, en Italia, en Holanda y en el resto de los Estados miembros», asegura planas

El ministro de Agricultura ha precisado que desde el Gobierno de España se está «prestando asistencia y lógicamente apoyando al transporte y a los transportistas españoles que están en este momento pasando por Francia» y encuentran dificultades por las condiciones generadas por esta situación.

También ha confirmado que el Ejecutivo francés ha prometido protección a los camiones españoles, tras la petición española, que se encuentran cerca de los aeropuertos en el entorno de París, así como del gran mercado de abastos.

Pese a que no ha habido ninguna declaración institucional, ya que Planas contestó a las preguntas de los medios de comunicación, el ministro español defendió la calidad de los productos españoles: «Si nuestras frutas y hortalizas, todos los productos agroalimentarios están situados en primer lugar dentro de Europa y también en muchos países del mundo, es precisamente por el trabajo de nuestros agricultores y ganaderos e industria agroalimentaria por su calidad y competitividad, y no por ninguna otra razón». Para Planas no hay ninguna duda: «los productos españoles son excelentes y ganan posiciones por calidad y competencia».

Por lo que respecta a los ataques contra los productos españoles, Planas ha explicado que ese tipo de actos «no contribuyen a lo que debe ser normal en el marco de un mercado único en la UE, el que cada uno pueda ofertar y vender sus productos», al tiempo que califica de «absolutamente inadmisibles». El ministro español ha mostrado su respeto a las manifestaciones y a la libertad de expresión, pero ha exigido el respeto a las personas y a los bienes.

EL PP CRITICA EL RETRASO CON EL QUE EL GOBIERNO Y PLANAS HA TARDADO EN REACCIONAR

Dolors Montserrat critica desde Bruselas al Gobierno y a Planas por no contestar al primer ministro francés con rapidez
Dolors Montserrat critica desde Bruselas al Gobierno y a Planas por no contestar al primer ministro francés con rapidez

Los eurodiputados Dolors Montserrat y Juan Ignacio Zoido lamentan que el Gobierno de España y el ministerio de Agricultura no haya reaccionado a las palabras del primer ministro francés, Gabriel Attal, que «se ha apropiado de un discurso populista para acusar a los productores españoles de competencia desleal». Attal había hecho estas declaraciones el sábado, y aunque Planas y el Gobierno aseguran mantener contactos para proteger a los transportistas españoles, lo cierto es que el ministro de Agricultura español no ha dicho nada públicamente hasta este lunes.

Desde todas las comunidades españolas se está pidiendo al Gobierno que defienda a los agricultores españoles. Así, por ejemplo, la consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo (PP-A), ha reclamado «contundencia» al Gobierno de España en defensa de los camiones españoles por la «caótica situación que se está viviendo estos días en la frontera francesa por el bloqueo de carreteras y el ataque» a esos transportistas nacionales.

Los agricultores franceses no cejan en su empeño de paralizar el país, cortando carreteras y, sobre todo, arremetiendo contra los camiones españoles que llevan productos en sus contenedores destino a Europa. Emmanuel Macron les dio este fin de semana la razón. Las medidas medioambientales y tributarias europeas les están perjudicando, pero sobre todo la «competencia desleal» de los agricultores y ganaderos españoles e italianos. Y de ahí no se mueven ni un ápice. Macron tiene que lanzar balones fuera después del traspié con los migrantes y las movilizaciones generalizadas por todo el país de los agricultores, mientras la ultraderecha azuza el conflicto animando a que se cierren las fronteras.

El gobierno francés ha tenido que movilizar más de 15.000 policías, mientras las vías de acceso a París estuvieron bloqueadas a lo largo de este lunes. En total, por ocho autopistas francesas no se podía circular. Acostumbrada como está Europa a las movilizaciones de los agricultores francés, el paro de este lunes es de los más firmes y mayores que se han visto.

PARÍS Y LOS TRANSPORTISTAS ESPAÑOLES SE HAN CONVERTIDO EN EL OBJETIVO DE LOS AGRICULTORES FRANCESES

Más de 15.000 gendarmes intentan contener las protestas que han bloqueado el acceso a París
Más de 15.000 gendarmes intentan contener las protestas que han bloqueado el acceso a París. Francia ha mostrado su compromiso a Planas de defender a los transportistas

París y los transportistas españoles se han convertido en su objetivo en lo que se ha comenzado a llamar el «lunes negro». La cuestión es llamar la atención de las autoridades europeas sobre lo que califican de «competencia desleal» de los productos agrícolas de países como España e Italia. Por si fuera poco, y para calmar la crispación, su propio presidente Emmanuel Macron les ha dado la razón este fin de semana.

El problema es que los alimentos que se transportan por carretera desde España deben obligatoriamente que pasar por Francia. Según las previsiones, van a quedar inmovilizados cerca de 21.000 transportistas españoles entre Irún y la Junquera.

La movilización comenzó la semana pasada y está dirigida contra las nuevas políticas medioambientales, tributarias y sociales del propio Macron y la de UE. Con el paso de los días, el ánimo de los manifestantes se ha ido incrementando y a sus protestas se han añadido otros sindicatos como la toda poderosa CGT. Las organizaciones sindicales ya han anunciado un paro indefinido para esta semana. No van a parar hasta que cambie su panorama.

LOS AGRICULTORES FRANCESES CRITICAN LOS BAJOS PRECIOS DE LOS PRODUCTOS ESPAÑOLES

El principal argumento que esgrimen los agricultores franceses es la competencia desleal de los productos españoles por sus bajos precios, mientras ni cumplen con los criterios medioambientales europeos, o son peores que los que ellos aplican. Macron les da la razón y se compromete, según preció el primer ministro galo, Gabriel Attal a «luchar contra la competencia desleal. A nuestros agricultores se les imponen reglas que a otros países no».

Ante el coste que les supone producir sus frutas y verduras, Francia se ha visto obligada -según denuncian los propios agricultores-, a importar cerca del 40% de los productos agrícolas de países como España e Italia. Achacan a las reglas medioambientales esos altos costes. Por este motivo, el Gobierno francés se ha propuesto presentar a sus socios europeos «más medidas» que «blinden» los productos galos. Attal concretó, además, que «iremos viendo producto por producto».

También el ministro de Agricultura francés, Marc Fesneau, ha asegurado que no habrá cierre de fronteras para los «productos españoles o italianos» como ha demandado la ultraderecha presidida por Anne Marie Le Pen. Fesneau cree que adoptar esta medida sería poner en cuestión el propio funcionamiento del mercado único.

DIEZ AUTOVÍAS BLOQUEADAS, 21.000 TRANSPORTISTAS AFECTADOS Y 10 MILLONES DE EUROS DE PÉRDIDAS DIARIAS

Diez autovías bloqueadas, 21.000 transportistas afectados y 10 millones de euros de pérdidas diarias
Diez autovías bloqueadas, 21.000 transportistas afectados y 10 millones de euros de pérdidas diarias

La movilización se ha traducido en el bloqueo de diez autovías de acceso a París, con cortes y bloqueos protagonizados por los simpatizantes de la Federación Nacional de Sindicatos de Explotadores Agrícolas (FNSEA) y de los Jóvenes Agricultores (JJAA). También se ha cortado el acceso al mercado internacional mayorista de Rungis, situado a las afueras de la capital francesa. Es el mayor mercado de productos frescos del mundo.

Los ánimos están tan encendidos que ni han servido los llamamientos a la calma del presidente de FNSEA, Arnaud Rousseau. Los representantes sindicales no quieren que surjan actos violentos ni provocaciones, sino presionar al Gobierno de Macron para que mejore las condiciones de los agricultores.

Ante los enfrentamientos, la Federación de Transporte de España (Fenadismer) calcula que hasta la fecha se han registrado 189 puntos que impiden entrar a Francia. Los transportistas españoles se han encontrado con 17.500 agricultores franceses y unos 8.500 tractores bloqueando las carreteras.

De acuerdo con los datos de la patronal de Transportes, cerca del 40% de los transportistas españoles que se dedican al tráfico internacional circulan por las carreteras francesas. En total, más de 26.000 empresas y 130.000 camiones. Francia es el paso obligado del 90% de esos camiones, aunque su destino sea cualquier otro punto de Europa. Fenadismer calcula que las pérdidas diarias alcanzan los 10 millones de euros.