El PP saca músculo en el Senado para advertir a Montero y su techo de gasto

El PP va a rechazar en el Senado el techo de gasto presentado por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que había sido validado por el Congreso de los Diputados el pasado 10 de enero. La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, lo acaba de confirmar este lunes, argumentando que «no es de recibo que el Gobierno siga gastando a costa de los españoles».

Gamarra asegura que España necesita «una política económica distinta y una política fiscal que alivie la presión del bolsillo de los españoles». La número dos del PP asegura que con la política económica y fiscal que desarrolla Pedro Sánchez, «el Gobierno está pensando más en recaudar para gastar que en aliviar la carga fiscal de los españoles».

Para la formación que preside Alberto Núñez Feijóo es fundamental que se tenga en cuenta la política fiscal y económica de los gobiernos autonómicos, que el Ejecutivo ignora por ser del PP, por reducir impuestos para reactivar la economía. Gamarra insiste en que Sánchez hace todo lo contrario, subir impuestos para recuperar el dinero que han rebajado las comunidades autónomas. Por ello, la secretaria general del PP pide al Gobierno «respeto a la autonomía fiscal» de los gobiernos autonómicos.

La tramitación del techo de gasto en el Senado, la senda de estabilidad presupuestaria diseñada por María Jesús Montero, ha sido retrasada por el PP, con lo que, de paso, supone también retrasar la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2024, ya que sin los objetivos de gasto como referencia, Hacienda no puede desarrollar las cuentas públicas.

LAS CONDICIONES DEL PP PARA DAR SU VISTO BUENO AL TECHO DE GASTO

Pero el PP quiere dejar la puerta entreabierta. Tras las afirmaciones de Gamarra, el vicesecretario de Economía popular, Juan Bravo condiciona el apoyo al techo de gasto a que el Gobierno atienda las exigencias del PP sobre la deflactación del IRPF; la bajada del IVA de la luz y del gas; del IVA de alimentos como la carne, el pescado y las conservas; y la eliminación del impuesto sobre la producción de energía.

Al igual que Gamarra, Bravo ha pedido también respeto a la autonomía fiscal de las autonomías, al tiempo que ha aprovechado para acusar al Gobierno de «voracidad fiscal» al anunciar que quieren poner de nuevo un impuesto de sucesiones y donaciones.

Por su parte, la portavoz del Grupo Popular en el Senado, Alicia García, también ha asegurado que el PP no apoyará los objetivos de estabilidad propuestos por el Gobierno si no cede a una serie de «exigencias» como «bajar impuestos a las rentas más bajas o el IVA a la carne, el pescado y las conservas». García ha reiterado, mostrándose escéptica sobre la posibilidad de que el Gobierno acepte sus propuesta, que no apoyarán el techo del gasto porque .«Sánchez está atado de pies y manos y el que manda es un prófugo de la Justicia».

EL PP OBLIGA A HACIENDA A PRESENTAR UN NUEVO TECHO DE GASTO

María Jesús Montero deberá elaborar una nueva senda de gasto si su primera propuesta es rechazada por el Senado
María Jesús Montero deberá elaborar una nueva senda de gasto si su primera propuesta es rechazada por el Senado

Este retraso auspiciado por los populares; sin embargo, no ha preocupado al Gobierno, ya que con ello ha ganado tiempo para negociar con sus socios de Gobierno y de investidura las partidas presupuestarias y recabar su apoyo para que salgan adelante en el Congreso de los Diputados, sabiendo que la mayoría absoluta del PP en el Senado no los va a aprobar.

Ante el anuncio de Gamarra de rechazar la senda de estabilidad, el Ministerio de Hacienda está obligado a presentar un nuevo techo de gasto, y si en el nuevo trámite del Senado vuelve a ser rechazado, entonces María Jesús Montero deberá elaborar las cuentas públicas de este año basando su referencia en la senda de estabilidad que presentó a Bruselas en abril de 2023.

Al fijar ese techo de gasto, las comunidades autónomas se verían perjudicadas dado que les dejaría menos margen presupuestario. Por este motivo, desde el PP, pese a anunciar su rechazo, no descartan negociar con el Gobierno «más flexibilidad fiscal para las comunidades». No obstante, ante la oposición mostrada por las autonomías del PP a la política del Gobierno y el rifirrafe abierto entre Gobierno y comunidades del PP por la eliminación o rebaja de impuestos como el de Sucesiones, no parece que haya ninguna posibilidad de que se entiendan.