Montero castiga a los contribuyentes en el IRPF por su cerrazón de no deflactar la tarifa

María Jesús Montero, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, además de número dos del PSOE, se ha convertido en la mayor cajera del reino. Su afán es recaudar como sea y cuanto más mejor. No importa quién pague, sino que pague. De alguna manera Pedro Sánchez debe cumplir todas sus promesas en aras de los más vulnerables. El problema es que está empobreciendo a la clase media, donde se concentra la mayoría de los trabajadores y de los contribuyentes.

La campaña de la renta de 2023, que comenzará el próximo 3 de abril y continuará hasta el 1 de julio, está a las puertas de dar su pistoletazo de salida. Pero lo que más preocupa a los españoles es que este año no ha empezado bien, al ver cómo sus nóminas se reducían por culpa de que María Jesús Montero ha decidido no deflactar la tarifa del IRPF. Todo sube menos los sueldos. Da lo mismo que se sea asalariado, directivo, funcionario o pensionista. Algunos han confirmado su subida salarial de 2024, pero están cobrando menos que en diciembre de 2023.

Montero parece que ha decidido que ‘el IRPF no se toca’ porque no en vano es el impuesto con el que la Agencia Tributaria más recauda, no solo en el momento de la recaudación de la renta, sino por las retenciones que a lo largo de todo el año hace en las nóminas. La ministra de Hacienda va a tener que incluir en su curriculum que desde que está ella a cargo del departamento la recaudación se ha disparado.

¿Cómo es posible si los salarios se están reduciendo? Pues es muy sencillo, porque Montero ha decidido no cambiar los tramos del IRPF para ajustar la progresión del impuesto a la progresión del coste de la vida, lo que los economistas llaman deflactar la tarifa en los tramos del impuesto de la renta.

MONTERO DEBERÍA PREOCUPARSE PORQUE EL CONTRIBUYENTE NO PAGUE MÁS SI SU PODER DE COMPRA NO HA AUMENTADO

Montero castiga a los contribuyentes en el IRPF por su cerrazón de no deflactar la tarifa
Montero castiga a los contribuyentes en el IRPF por su cerrazón de no deflactar la tarifa

Para llevar a cabo esta deflactación se debe tener en cuenta la inflación, ya que el objetivo es que el contribuyente no pague más a Hacienda cuando su poder de compra no ha aumentado. Y en España no se ha deflactado en la escala estatal desde el año 2008, ni se ha empezado a hacer en este ejercicio mientras que, por el contrario, el IPC acumulado en el periodo del 2008 al 2023 ha sido de más de un 30%. La conclusión no puede ser otra que los contribuyentes sufrimos una subida del IRPF desde hace 15 años de forma encubierta.

Montero se ha comprometido esta semana, una vez aprobado el salario mínimo con su subida del 5%, que se van a ajustar los tramos. Pero ya veremos, porque ni se sabe de cuánto va a ser ese ajuste. Lo único que sabemos que hasta noviembre de 2023, la Agencia Tributaria había engordado sus arcas en 112.591 millones por el IRPF, 10.000 millones de euros más que un año antes, como la cantidad que espera que la UE desembolse a España por el último tramo de los fondos europeos de los Next Generation.

La situación económica de los contribuyentes se agravó desde 2021 en que la inflación se disparó como un cohete superando los dos dígitos, muy por encima del 10%. Y aunque se fue moderando en 2022 y en 2023, en que el IPC acabó registrando una subida de los precios del 3,1%, lo cierto es que los contribuyentes no solo pagan más por la cesta de la compra sino que además deben pagar más por el impuesto que grava su renta. Y todo porque el empecinamiento de Montero de no deflactar la tarifa.

SOLO EN ALGUNAS COMUNIDADES SE HA DEFLACTADO LA PARTE AUTONÓMICA DEL IRPF, PERO NO EN TODAS

Madrid es una de las comunidades que deflactó la tarifa autonómica en 2023 y lo hará en 2023
Madrid es una de las comunidades que deflactó la tarifa autonómica en 2023 y lo hará en 2023

La única compensación por la subida de la inflación la han encontrado los contribuyentes de algunas comunidades autónomas, no de todas, porque han decidido deflactar la parte autónomica correspondiente. En 2023 así lo aplicaron las comunidades de Madrid, Andalucía, Canarias o País Vasco. Y en 2024 volverá a repetir el mismo proceso la comunidad dirigida por Isabel Díaz Ayuso, además de País Vasco, Aragón y Navarra. Mientras, la ministra de Hacienda se sigue negando, y aunque no le ha quedado otra que ceder tras la subida del salario mínimo, todavía no se sabe el portanje de la deflactación..

Una de las razones de la resistencia de María Jesús Montero es que está cayendo la recaudación de otros impuestos, como la del IVA que con las medidas anticrisis está viendo mermadas las cantidades recibidas por Hacienda. Por los últimos datos conocidos, hasta el pasado mes de octubre, la recaudación por IVA fue de 661 millones menos. En la Agencia Tributaria no están preocupados dados los suculentos ingresos totales hasta noviembre de 252.927 millones, y el 75% era gracias al IRPF:

Pero a los bolsillos de los contribuyentes no les va también, ya que lo poco que les recortan por un lado (el IVA en algunos productos, no en todos los que su precio se ha disparado) Hacienda lo recupera con creces por el otro (IRPF). El contribuyente con una renta media poco nota que la presión fiscal está aumentando en las rentas más altas, por ese eslogan publicitario de que pague quien más gana. A Pedro Sánchez se le llena la boca de repetirlo, pero la realidad es más tozuda cuando confirma que las rentas medias son las que más aportan al IRPF.

Feijóo ha pedido a Sánchez que eleve la exención del IRPF un 5%, Montero responde que lo eleverá, pero sin decir cuánto

Desde la oposición, llevan años reclamando la deflactación de la tarifa. Algunas comunidades el PP, como hemos mencionado, lo están haciendo en su parte autonómica, y justo ahora que se acaba de aprobar la subida del 5% del salario mínimo interprofesional, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha aprovechado para pedir a Sánchez que «eleve la exención del IRPF en el mismo procentaje (un 5%). Los cálculos de los técnicos del PP aseguran que si no se deflacta ese 5% la tarifa, las arcas del Estado voverán a ganar más de 572 millones de euros.

La avispada Montero enseguida respondió a Feijóo que sí, que lo va a hacer, que habrá «habrá un incremento del mínimo extos en el IRPF en 2024», aunque nos va a tener en ascuas hasta la próxima nómina, porque lo que no ha desvelado es el porcentaje de ese incremento.