Juan Carlos Cueto defiende que el material sanitario se vendió acorde a precio de mercado

El empresario Juan Carlos Cueto, el presunto ‘cerebro’ de la empresa a la que se adjudicaron los contratos de mascarillas que investiga la Audiencia Nacional, ha asegurado al juez del ‘caso Koldo’ que trató de ayudar a los españoles con su actuación y no aprovecharse de la venta de material sanitario.

Según han confirmado fuentes jurídicas, en su declaración como investigado ante el titular del Juzgado Central de Instrucción Número 2 Cueto se ha remitido a un informe elaborado por la consultora KPMG en 2021 que concluiría que los precios de venta de mascarillas fueron acordes al mercado, añadiendo que tenían poco margen de beneficio económico.

Otras fuentes consultadas señalan que Cueto –que solo ha respondido a preguntas de su abogado– ha detallado que se trató de una operación muy costosa y con muchos viajes a China, en los que habrían participado empresas certificadoras españolas para dar cuenta del material del producto –entre ellas Bureau Veritas.

Tras su declaración ante el juez, la Fiscalía Anticorrupción ha solicitado la retirada del pasaporte de Cueto, una petición a la que no se ha opuesto su defensa y a la que se han adherido las acusaciones populares ejercidas por PP y Vox. Al no haber oposición a la misma, se espera que el juez lo acuerde este mismo jueves.

Cabe recordar que el Ministerio Público sitúa a Cueto como la «persona que realmente controla la sociedad Soluciones de Gestión, integrada en el grupo Cueto», aunque esta figurase como propiedad de otro de los investigados, el empresario vasco Íñigo Rotaeche. Cueto, según Fiscalía, se habría embolsado 9,6 millones de euros.

En este sentido, Anticorrupción detalla en su querella «el liderazgo que Cueto» ejerce sobre el grupo que lleva su apellido, «siendo el responsable último de las decisiones concernientes a este grupo empresarial». Los principales investigados, añaden, daban novedades y pedían permiso a Cueto «para la ejecución de préstamos y toma de decisiones».

La Fiscalía deja claro que existió «una relación directa y estrecha» entre el exasesor y exescolta del exministro José Luis Ábalos, Koldo García, y el propio Cueto, «que no se circunscribe únicamente a la adjudicación de los contratos».

VOX VE PRECIPITADO LLAMAR A ÁBALOS PERO NO LO DESCARTA

La vicesecretaria jurídica de Vox, Marta Castro, ha explicado en declaraciones a la prensa que Cueto no ha dado «ninguna explicación más allá de haber hecho una actuación incluso altruista en defensa de la vida de los españoles y que tenían poco margen de beneficio económico».

A preguntas de los medios, Castro ha explicado que Cueto «ha dicho que desde luego su intención no había sido aprovecharse, sino que era ayudar a España, a los españoles».

Con todo, la formación liderada por Santiago Abascal ha señalado que «hay que analizar profundamente informes, presupuestos, el precio de mascarillas y los proveedores». «Es un trabajo muy minucioso y que ahora mismo no tengo todos los datos como para poder ofrecerles una conclusión más firme», ha apuntado.

Cuestionada sobre si se plantean llamar a declarar al exministro José Luis Ábalos –su exescolta y exasesor, Koldo García, es uno de los principales investigados–, Castro ha reconocido que «es precipitado» porque antes deben de analizar el sumario de la causa.

«Pero desde luego por la experiencia de las otras actuaciones judiciales no lo descartamos. Cuando se abre una investigación hay que ver qué líneas de investigación se pueden seguir y depurar todas las responsabilidades de quienes estuviesen vinculados«, ha añadido.

RESPONSABLES DE LOS CONTRATOS

Anticorrupción asegura que Soluciones de Gestión «habría sido empleada como una empresa instrumental en un proyecto común» entre el presidente del Zamora CF, Víctor de Aldama, y el propio Cueto, «quienes a pesar de no figurar documentalmente habrían sido los responsables» de los contratos sobre los que indaga el juez.

El Ministerio Público asegura que Koldo era la persona a la que usaban para «agilizar» trámites con el Ministerio de Transportes en la contratación durante la pandemia para la venta de mascarillas, en concreto facilitando los procesos de adjudicación de material sanitario a la empresa Soluciones de Gestión.

En la citada querella de la Fiscalía constan conversaciones extraídas de los pinchazos telefónicos que los investigadores llevaron a cabo. «Esto era un favor que le estaba pidiendo tu vecino (Koldo)… él y su exjefe… y parece ser que el otro ha dicho que sí… porque le han dado otro favor a cambio», le llegó a decir Cueto a Rotaeche, que era una persona de su «confianza». La Fiscalía no aclara a qué exjefe de Koldo se refiere.

LA ENTREGA DE «CHORIZOS»

A pesar de que poco antes de su detención la relación entre Koldo y Aldama continuaba latente a través de terceros, el Ministerio Público asegura que ambos sí mantenían relación «durante la adjudicación de los contratos investigados». Ese mismo mes de septiembre, Koldo se dirigió a Cueto para hablar de Aldama: «A mí me resolvió los problemas que tenía para poder ejecutar y traer lo que yo necesitaba de fuera».

Para Anticorrupción, se puede deducir que «Koldo podría estar haciendo alusión a la intermediación de Aldama en la adquisición de mascarillas en el marco de las adjudicaciones investigadas». «Y lo más significativo es que lo hace hablando en primera persona», apunta la Fiscalía, señalando que en muchas charlas los investigados se refieren al presidente del Zamora como «comisionista» frente a la Administración Pública.

En este sentido, la Fiscalía deja claro que Cueto y Aldama seguían teniendo un mes antes del estallido de la operación «asuntos en común, algunos de ellos relevantes» en el marco de la causa. En concreto, el pasado 26 de enero Aldama «habría entregado a Cueto algún objeto» al que el propio Aldama se refirió como «chorizos».

Para Anticorrupción resulta llamativo que unos pocos días después Cueto le contase a Koldo que estuvo con Aldama, «el cual le habría entregado algo de lo que hablarían en persona». Además, Cueto le informó –en relación a Aldama– que «las aguas pueden volver a su cauce». Según la Fiscalía, eso implicaría que los tres investigados «siguen manteniendo asuntos en común de los que tratar».

El auto también recoge la conversación que Cueto mantuvo con una trabajadora de Aldama en relación a una citación que este último tenía para comparecer ante la Agencia Tributaria. En la misma charla, Cueto advierte de que las personas que fuesen a declarar a este tipo de citaciones deberían hacerlo con asistencia letrada.

«MIEDO» A QUE ALGUIEN «EMPIECE A LARGAR Y RAJAR»

«Como vaya alguien allí y empiece a largar y rajar tiene un problema», espetó Cueto. «Este miedo», según la Fiscalía, «podría estar ligado a que Aldama fuera considerado un comisionista a ojos de la Agencia Tributaria».

A este respecto, Rotaeche explicó a Cueto que el inspector de la Agencia Tributaria quería citar a los socios y administradores de Soluciones de Gestiones para que compareciesen ante él.

«En el transcurso de la llamada, hacen alusión a las supuestas intenciones del actuario con esta inspección, refiriendo que el actuario no admitiría como gasto a Soluciones de Gestión el pago a Aldama porque habrían pagado una comisión encubierta a Aldama por sus contactos en el Ministerio», explica Anticorrupción.