En España, Semana Santa y Cuaresma son sinónimos de tradición, tanto en lo espiritual como en lo culinario. La gastronomía se muestra como un reflejo de la cultura de un país, y durante estas fechas los fogones españoles se llenan de propuestas auténticas que, enriquecen el paladar con recetas que han pasado de generación en generación.
En este reportaje especial, desvelaremos tres exquisitas propuestas gastronómicas que lograrán que vivamos estas fechas con auténtico sabor. Platos que nos hablan de historia, ingredientes de cuaresma y manjares que se convierten en un homenaje a la mesa durante estos días de recogimiento.
1DE LA TIERRA A LA MESA: GUISOS Y POTAJES TRADICIONALES PARA SEMANA SANTA
La Semana Santa es una época para volver a las raíces y qué mejor forma de hacerlo que con los guisos y potajes tradicionales. Herencia de un pasado donde la carne se reservaba para momentos menos austeros, estos platos se nutren de legumbres y vegetales. El potaje de vigilia, con su base de garbanzos, espinacas y bacalao, es un ejemplo clásico que no puede faltar. A él se suman variantes regionales como la olla gitana de Murcia donde las peras aportan un toque dulce inesperado, o el caldo gallego que, aunque no se ciña exclusivamente a estas fechas, es un clásico reconfortante que se adapta al periodo de Cuaresma eliminando las carnes.
Cada región tiene su secreto para convertir estos platos en obras maestras: el pimentón de la Vera en Extremadura, el aceite de oliva virgen extra andaluz o los productos de la huerta murciana. Los guisos y potajes adquieren un sabor único, producto de la sabiduría popular y de la calidad de los ingredientes locales.
