Triunfa con esta tarta de chocolate blanco: receta casera de un postre rompedor

La tarta de chocolate blanco es una obra maestra culinaria que deleita los sentidos con su sabor dulce y cremoso. Esta delicia es un regalo para los amantes del chocolate, y su rica textura y suavidad la convierten en un postre irresistible para cualquier ocasión. En este texto, exploraremos los orígenes, la historia, una receta paso a paso, variaciones creativas, opciones de maridaje y acompañamientos para esta exquisita creación gastronómica.

Antes de ir con la receta hay que decir que el chocolate blanco, un derivado del chocolate compuesto principalmente por manteca de cacao, azúcar y leche, se inventó a mediados del siglo XX. Aunque no se conoce la fecha exacta de su invención, se cree que su popularidad comenzó a aumentar en la década de 1930, cuando la Nestlé lanzó al mercado el primer chocolate blanco comercializado en forma de tableta.

La tarta de chocolate blanco, como una extensión de esta creación, comenzó a ganar popularidad en la década de 1970 y desde entonces ha sido un éxito en pastelerías y hogares de todo el mundo. Su sabor suave y dulce, combinado con su textura cremosa, la convierte en un postre muy apreciado por los amantes del dulce.

tarta de choco blanco Moncloa

Receta de tarta de chocolate blanco

Ingredientes:

  • 200g de chocolate blanco
  • 200g de galletas tipo digestive
  • 100g de mantequilla derretida
  • 300ml de nata para montar
  • 200g de queso crema
  • 50g de azúcar glas
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • Fresas o frutas frescas para decorar (opcional)

Instrucciones:

  1. Tritura las galletas tipo digestive hasta obtener migas finas. Puedes hacerlo utilizando un procesador de alimentos o simplemente colocándolas en una bolsa de plástico y golpeándolas con un rodillo.
  2. Mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta que estén bien combinadas.
  3. Presiona la mezcla de galleta y mantequilla en el fondo de un molde desmontable para tarta, creando una base uniforme. Refrigera durante al menos 30 minutos para que se endurezca.
  4. Mientras tanto, derrite el chocolate blanco al baño María o en el microondas, revolviendo ocasionalmente hasta que esté suave y sin grumos. Deja enfriar ligeramente.
  5. En un tazón grande, bate la nata para montar hasta que formen picos suaves. Añade el queso crema, el azúcar glas y el extracto de vainilla, y continúa batiendo hasta que la mezcla esté suave y cremosa.
  6. Incorpora el chocolate blanco derretido a la mezcla de nata y queso crema, mezclando suavemente hasta que esté bien combinado.
  7. Vierte la mezcla de chocolate blanco sobre la base de galleta en el molde para tarta y alisa la superficie con una espátula.
  8. Refrigera la tarta durante al menos 4 horas, o hasta que esté firme.
  9. Decora la tarta con fresas u otras frutas frescas antes de servir, si lo deseas.

¡Y ahí lo tienes! Una deliciosa tarta de chocolate blanco lista para disfrutar.

tarta de chocolate blanco Moncloa

Variaciones

La tarta de chocolate blanco es una base perfecta para experimentar con diferentes sabores y texturas. Aquí tienes algunas ideas para variar esta receta clásica:

  1. Con Frambuesas: Agrega frambuesas frescas a la mezcla antes de verterla sobre la base de galleta para un toque de acidez y frescura.
  2. Con Limón: Agrega ralladura de limón y jugo de limón a la mezcla para un sabor cítrico y refrescante.
  3. Con Coco: Incorpora coco rallado a la mezcla para un sabor tropical y exótico.
  4. Con Frutos Secos: Agrega trozos de almendras, nueces o avellanas a la mezcla para un toque crujiente y sabroso.

Maridaje

Para maridar con la tarta, considera opciones que complementen su dulzura y cremosidad. Algunas opciones incluyen:

  • Vino Moscato: Un vino dulce y afrutado, como un Moscato, complementa bien la dulzura del chocolate y resalta sus sabores.
  • Champán o Cava: El champán o el cava son opciones elegantes que añaden un toque de celebración y sofisticación a cualquier ocasión.
  • Café o Té: Un café espresso o un té negro son opciones clásicas que equilibran la dulzura del chocolate blanco con su sabor robusto y su ligero amargor.

Acompañamientos

Para acompañar la tarta, considera opciones que realcen su sabor y textura. Algunas sugerencias incluyen:

  • Salsa de Frambuesa: Una salsa casera de frambuesa añade un toque de acidez y frescura que complementa bien la dulzura del chocolate.
  • Crema Batida: Una generosa porción de crema batida, espolvoreada con ralladura de limón o coco rallado, agrega una textura ligera y aireada que contrasta con la cremosidad del chocolate blanco.
  • Helado de Vainilla: Una bola de helado de vainilla sirve como un acompañamiento clásico que añade un toque de frescura y suavidad a cada bocado.
vainilla Moncloa

Otras recetas con chocolate blanco

  1. Brownies: Una versión decadente de los clásicos brownies, donde se agrega chocolate blanco derretido a la mezcla y se incorporan frambuesas frescas para un toque de acidez y color.
  2. Trufas: Trufas suaves y cremosas hechas con una mezcla de chocolate blanco y crema batida, enrolladas en cacao en polvo, coco rallado o nueces picadas para un toque extra de sabor y textura.
  3. Cheesecake: Un postre indulgente compuesto por una base de galletas trituradas, relleno de queso crema y chocolate blanco, horneado hasta que esté firme y luego enfriado antes de servir.
  4. Cupcakes: Deliciosos cupcakes esponjosos, donde se agrega chocolate blanco derretido a la masa y se decoran con una crema de mantequilla de chocolate blanco y virutas de chocolate blanco para un toque final.
  5. Cookies: Galletas crujientes y llenas de sabor, con trozos de chocolate blanco y nueces de macadamia, horneadas hasta que estén doradas y ligeramente crujientes.
  6. Mousse: Un postre ligero y aireado, hecho con chocolate derretido, claras de huevo batidas y crema batida, refrigerado hasta que esté listo para servir.
  7. Cake Pops: Bolitas de pastel mezcladas con crema de queso y chocolate derretido, formadas en palitos de piruleta, decoradas con glaseado de chocolate blanco y adornos de colores.
  8. Tartaletas de Frutas: Mini tartaletas rellenas con una mezcla de crema de chocolate blanco y queso crema, cubiertas con una variedad de frutas frescas, como fresas, kiwis y arándanos.
  9. Fondue: Un postre divertido y versátil, donde se derrite chocolate con un poco de crema en una fondue, y se sirve con una variedad de frutas frescas, malvaviscos y galletas para mojar.
  10. Ganache: Una cobertura rica y cremosa hecha con chocolate blanco derretido y crema caliente, perfecta para cubrir pasteles, cupcakes o galletas, o para usar como relleno en postres.

Conclusión

En conclusión, la tarta de chocolate blanco es un postre exquisito que combina la dulzura del chocolate con la suavidad y cremosidad de una tarta. Con su rica textura y su sabor irresistible, esta delicia es perfecta para cualquier ocasión especial o simplemente para darse un capricho dulce. Ya sea que sigas la receta clásica o te aventures con variaciones creativas, la tarta de chocolate blanco seguramente te dejará con ganas de más con cada bocado. ¡Así que prepara tus ingredientes y disfruta de esta tentación celestial!