Rubiales al ministro Guirao: «El presidente se comprometió delante de Ceferin»

En diciembre de 2018 el presidente Pedro Sánchez recibió un jarro de agua fría tras las declaraciones a un diario deportivo de Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, que maneja los destinos de las competiciones de fútbol a nivel europeo.

Pero en una reunión que mantuvieron ambos, Ceferin le arrancaba a Sánchez un compromiso, supuestamente, de arreglar el problema entre La Liga presidida por Javier Tebas y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) de Luis Rubiales sobre la disputa de partidos de fútbol los viernes y lunes. La Liga quería disponer de los horarios a su arbitrio y jugar esos días además de los fines de semana.

La RFEF se oponía a ello y pedía horarios libres de fútbol profesional para que los equipos modestos de Segunda y Tercera división no se vieran perjudicados, ya que la coincidencia con el fútbol profesional les podía restar aficionados a sus partidos. Ceferin aprovechó un encuentro con Sánchez para realizar esta demanda, ya que la pelea duraba desde el verano de aquel mismo año y no se veía el final del conflicto.

Para tratar este asunto Rubiales habló al menos en dos ocasiones con José Guirao, ministro de Cultura y Deportes de Pedro Sánchez. La primera de estas llamadas se producía mientras Rubiales iba conduciendo desde Valencia a Madrid y dedicaba ese verano a mudarse a la capital, tras granar en mayo de 2018 las elecciones a la RFEF. José Guirao también era un recién llegado al Ministerio de Cultura y Deporte pues Pedro Sánchez lo habia nombrado ministro en junio de 2018 y se encontraba con la patata caliente de una demanda de La Liga a la RFEF.

El ministro fue directamente al grano: «Una pregunta, ¿has visto hoy El País?». Se refería a una portada del conocido diario que recogía el malestar de los clubes modestos por el trato que se les dispensaba desde La Liga en el convenio que se negociaba con la RFEF para disputar las competiciones. «Algo he visto, sí», le respondió Rubiales. Pero Guirao era directo y dijo a Rubiales «la pregunta es ¿estáis esperando a la resolución del día 7 del juez?» y añadió «¿es La Liga la que ha demandado a la Federación con el tema de los viernes y los lunes, no? Imagínate que os dan la razón ¿váis a llegar a un acuerdo o no?», preguntaba el ministro.

A este intento de mediación del ministro, Luis Rubiales explicaba que «si nos dan la razón, yo estoy convencido de que vamos a ganar… y va a decir el juez que los lunes y viernes sólo se juega si la Federación lo autoriza pues tendrán que venir a hablar con nosotros si quieren jugar lunes y viernes y si no quieren jugar lunes y viernes y aceptan jugar solo los sábados pues nosotros nos quedaremos quietos y si ponen otros días tendremos que ver cómo lo hacemos».

«VOY A FIRMAR POR TU, POR EL PRESIDENTE, TODO ESTE ARTIFICIO ES EL DINERO QUE USAN PARA LO QUE NO ES FÚTBOL, TIENEN COMPRADOS A LOS MEDIOS»

Entonces Guirao insistía en su pregunta: «O sea que estáis esperando a lo que diga el juez para negociar, ¿no?», a lo que Rubiales se exculpó y añadió que «yo te llamé para avanzar que íbamos a tener un problema con los lunes y los viernes (…). Voy a firmar por ti, voy a firmar por el presidente. Todo este fuego de artificio es el dinero que utilizan para todo eso que no es fútbol, tienen comprados a los medios, en el bolsillo, firman convenios con Prisa con Unidad Editorial y luego publican lo que quieren. Una cosa es la opinión pública y otra la publicada. La publicada es de ellos, pero la opinión pública está con nosotros a muerte».

LOS CLUBES ESTÁN INQUIETOS

El ministro le añade entonces que «era… saber cuales eran las previsiones que teniáis, como El Pais dice que los clubes están inquietos… por eso te preguntaba» y ahí es donde Rubiales aprovecha para hablar mal de Tebas, presidente de La Liga: «Los clubes están inquietos pero yo creo que Tebas les ha mentido, Tebas les dice que nosotros hemos estado callados, que nosotros hemos permitido que eso se venda, que eso según el Real Decreto es de ellos. Nosotros lo que decimos es que hay un convenio que se firmó hace 4 años y se renovó el año pasado donde La Liga le compra a la RFEF el derecho de jugar viernes y lunes. Entonces si tú compras algo a otro es porque no lo tienes (…) ellos nos han denunciado pues nos han denunciado y ahí iremos hasta el final».

El ministro Guirao lo resumía con un «vale, entonces si el día 7 ganan ellos pues tenéis que tragar con eso y si ganáis vosotros tendrán que negociar» y el ex presidente de la RFEF contesta que «si ellos ganan se jugará lunes y viernes» y añade su intención de recurrir si la sentencia era así: «Y entonces tendremos que ir a un juicio que durará años para ver quien tiene razón. Si les dan cautelares pues nos la envainaremos».

«De acuerdo, era por saber cómo iba la cosa», finaliza Guirao a lo que Rubiales se despide con un «cualquier cosa, tú sabes, que yo siempre he estado».

NO SE FIRMÓ HASTA JUNIO DE 2019

Pero el conflicto se alargaba al verano, de hecho el convenio no se firmaría hasta junio de 2019. Poco antes, Rubiales recibía de nuevo una llamada de Guirao que le intentaba gastar una broma al ex presidente de la RFEF: «Enhorabuena, por qué la Sub 21 gana todo y la otra no gana?», pregunta el ministro, a lo que Rubiales contestó que «la otra va a ganar también cosas, pero es muy complicado y estamos en camino (…). Pero como la vida, ya sabes del éxito al fracaso hay una delgada línea», un ejemplo que aprovechó el ministro Guirao para afrontar de manera directa el problema, «pues de eso quería yo hablarte, de la delgada línea roja del éxito al fracaso. Oye, ¿el convenio lo vamos a firmar o no?».

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Rubiales trató de «rascar» algo y argumenta que «creo que falta un empujoncito, un poco de cariño al fútbol modesto. Creo que Andreu (Andreu Camps, secretario de la RFEF entonces e investigado por la UCO en la causa contra Rubiales) iba a hablar con Mariano (Mariano Soriano, director general de Deportes del ministerio)» y añadía que «si tú me llamas para decirme que lo firme lo voy a firmar ministro, tú lo sabes, pero yo creo que aquí hay un acuerdo más amplio, que es lo que tiene que llegar el 1 de septiembre, nosotros necesitamos… que ya se comprometió el presidente delante de Ceferin que se iban a abordar los cambios». Esos cambios supondrían la desaparición de los partidos de fútbol televisados los lunes y los viernes.

El ministro entonces se justificó delante de Rubiales y dijo que «nosotros el Decreto lo estamos preparando para cuando se pueda meter», para luego hacer una advertencia muy sutil: «Te decía, porque si no (si no hay acuerdo) nosotros tenemos que sacar Resolución y para sacarla tenemos que hacer un poco de Herodes, partir al niño por la mitad y cuando se parte el niño por la mitad nadie queda contento». Lo que el ministro le planteaba a Rubiales era una medida de presión para que pactase con La Liga de Javier Tebas.

PROBLEMAS PARA «VENDERLO»

Entonces Rubiales le explicó los problemas que tenía para llegar a un acuerdo: «Hemos cedido todo. (…) Lo único que pedimos es un horario en que los clubes de segunda o tercera no coincidan con el futbol profesional» y entonces incluía una «espinita» que tenía clavada al decirle al ministro que «yo no quiero que me quiten la querella (de la Liga contra Rubiales) pero sí que conste que es un tema personal» y para justificarse le recordó a Guirao que «cuando Mariano le ha pedido a Andreu «oye sacadlo», lo hemos hecho, pero yo necesito sentarme delante de los equipos no profesionales y decirles, oye vuestros equipos van a tener una hora en la que no coincidan con la televisión o el futbol profesional».

Después de eso el ministro continuó en silencio a lo que Rubiales añadía: «No te preocupes, solo falta un guiño. Yo me presento ante los pobres, entre comillas diciendo, menos dinero, el balón y los horarios todo para ellos, los lunes y viernes que hemos peleado por ellos los han sacado del Convenio. Yo no les puedo ofrecer nada, estamos firmando por la paz, no estamos firmando por nada. (…) Si conseguís ese poquito esto está hecho», pero inmediatamente se rindió y añadió que «ya luego te digo una cosa. Si no lo consigues y me llamáis y me decís «mira Luis fírmalo y ya te compensaremos como sea» pues lo voy a acabar firmando. Pero porque me lo digas tú y no la gente de la Liga. Que yo pueda vender algo… pero ahora mismo no tengo nada para vender».

El ministro decidió cerrar entonces la conversación. «Entonces hay buena voluntad de hacerlo, ¿no?, dijo. A lo que Rubiales replicó de nuevo que «no tengo nada que vender. Yo soy La Liga y a los dos días salgo diciendo éste es tonto» para luego suavizar su discurso: «Yo agradezco mucho tu llamada. Si no puede ser de 4 a 6 los domingos sin televisión, pues algo que yo pueda vender mínimamente. Necesito una salida».

El ministro se daba por enterado con un escueto «vale» a lo que Rubiales añadía que «si tú me tienes que llamar yo estoy aquí a las órdenes».