Detenidos tres menores por acceso ilegal informático y delito contra la intimidad en centros docentes de Palma

Agentes de la Policía Nacional han detenido a tres menores por tres hechos diferentes, a dos de como presuntos autores de un delito de revelación de secretos y amenazas y al tercero como presunto autor de un delito contra la intimidad, en centros docentes de Palma.

En una nota de prensa, la Policía ha informado que ha esclarecido dos delitos en los que se han visto envueltos menores de edad, quienes se habrían valido de la confianza que tenían con otros compañeros de curso para hacerse con las credenciales de sus cuentas personales escolares, introduciéndose en sus perfiles sin su conocimiento ni autorización y suplantando su identidad, haciéndose pasar por ellos.

Ambos hechos se llevaron a cabo mediante una conocida aplicación que proporciona acceso a los estudiantes a material, tareas y facilita contacto o presentar trabajos durante el curso, así como el seguimiento tanto por padres como por profesores.

En uno de los hechos, un menor que conocía las claves de acceso a la cuenta de un compañero, se introdujo en ella y comenzó a enviar mensajes fuera de tono e incluso a entablar conversaciones con otros alumnos haciéndose pasar por su compañero, llegando incluso a verter amenazas o proposiciones sexuales.

En el otro hecho, se trataba de un acceso ilegal a la cuenta de una compañera perpetrado por otra alumna de su curso que conocía sus credenciales, haciendo comentarios contra los profesores, quejándose del trabajo escolar, y llegando a insultar y amenazar a varios integrantes del equipo escolar, siempre utilizando el nombre del perfil al que había accedido ilegalmente.

Recibidas las dos denuncias, en el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional se iniciaron las primeras pesquisas exonerando a los titulares de las cuentas que habían producido los hechos, ya que estos escolares no tenían nada que ver con lo ocurrido.

Tras contactar con el centro docente, se pudo comprobar la veracidad de las manifestaciones de los alumnos inocentes que se habían convertido en víctimas. Personas desconocidas habían usado sus cuentas sin su conocimiento ni autorización y habían llevado a cabo los hechos denunciados.

En estrecha colaboración con los centros docentes afectados se logró identificar a los presuntos autores, tratándose de menores de edad y alumnos del mismo curso.

Estos menores pudieron ser señalados sin género de dudas por medio de técnicas de investigación tecnológica, siendo detenidos como presuntos autores de los hechos.

Asimismo la Policía Nacional ha esclarecido un tercer ilícito, también cometido por un menor quien habría difundido y publicado en una reconocida red social una fotografía íntima que habría tomado a otro menor en las duchas de unas instalaciones deportivas sin su consentimiento.

La imagen se tomó aprovechando que el menor se duchaba en las instalaciones y, tras darse éste cuenta de ello, se lo recriminó a quien habría hecho la fotografía, pidiéndole que la borrase y que no se la pasase a nadie.

Posteriormente tuvo conocimiento de que no solo no la había borrado, sino que incluso la habría mostrado a terceros y subido a una red social, conductas que integran varios delitos del código penal.

De las indagaciones policiales se pudo corroborar la identidad del presunto autor tanto de la fotografía como de la subsiguiente difusión.

Actualmente se ha dado traslado de las denuncias y las diligencias policiales practicadas por el Grupo de Delitos Tecnológicos a la Fiscalía de Menores.

Con respecto a los ilícitos realizados en los centros escolares, éstos han tomado las medidas disciplinarias procedentes, destacando la Policía tanto la predisposición como la colaboración de los centros cuya participación en la investigación ha resultado fundamental para el total esclarecimiento de los hechos denunciados.

La Policía ha considerado importante insistir en que las credenciales de acceso a cuentas personales en internet son privadas e intransferibles y que introducirse sin permiso en los perfiles de otras personas es un delito contemplado en el código penal.

Además, ha recordado que la toma de fotografías en una esfera íntima, a terceros, sin su consentimiento para después difundirlas también es una conducta delictiva con su correspondiente pena pero que, dada la condición de menor de la víctima podría incluso ser considerada un tipo de distribución de pornografía infantil, lo cual agrava enormemente el hecho. Si bien, ha añadido, dejando al margen este aspecto, el daño que se le puede producir a la víctima al difundir este tipo de imágenes es muy grave.