ERC y la encrucijada de Junqueras y Torrent: «Ninguno de ellos debe seguir»

Oriol Junqueras se encuentra ante la encrucijada. Su decisión de tomarse hasta casi cinco meses para repensar su futuro al frente de la formación republicana e independentista ha dejado una enorme incertidumbre, hasta el punto de dar más argumentos a los críticos con la deriva pragmática que ha iniciado ERC desde 2021.

Pere Aragonès ha tratado de equilibrar y encajar la corriente práctica y pactista de Junqueras con la línea moderada de Roger Torrent y el inicio del diálogo y la negociación ante la posibilidad de acabar siendo fagocitada por Junts y el PSC. Instalado en el ‘no’ y la exigencia, la vía emprendida por Aragonès se ha quedado en un callejón casi sin salida y con el descabezamiento de Esquerra.

«Junqueras ha realizado una renuncia táctica», afirman fuentes no oficiales en el partido. Se va a tomar su tiempo, hablará con las bases e iniciará así su carrera al liderazgo pero con el apoyo de la militancia. No obstante, estos mismos militantes y simpatizantes han dado la espalda a ERC por iniciar la vía del diálogo, romper con Junts y montar una mesa de negociación que no ha tenido efecto alguno desde la investidura de Pedro Sánchez.

EL PRAGMATISMO DE JUNQUERAS DIVIDE

Junqueras, más pragmático que nunca, se comió prisión, mientras el líder de Junts no ha pisado más de dos días seguidos la cárcel. El hasta ahora líder de ERC asegura que el referéndum era la vía y que no tendría problema alguno para volverlo a hacer, una nueva consulta ilegal, pero ha borrado la independencia del vocabulario de los republicanos.

Junqueras es el aparato si se mantiene al frente de ERC

La salida en falso de Junqueras ha levantado las voces críticas. Los insultos contra el líder que llegó a enfrentarse a más de nueve años de prisión, con una condena en firme y un indulto parcial, ha visto su camino truncado por unas expectativas irreales, las mismas que afirman tener quienes buscan el enfrentamiento de nuevo. Y es que, la sociedad catalana ha mostrado un hartazgo superior a tenor de los resultados electorales del pasado domingo. Aragonès y Marta Rovira, secretaria general del partido, han dado el paso atrás, pero Junqueras se tomará casi cinco meses antes de enfrentarse a su adversario o sus adversarios en las primarias.

Junqueras y Bolaños posan tras sellar el acuerdo entre ERC y PSOE
Junqueras y Bolaños posan tras sellar el acuerdo entre ERC y PSOE

De los ruidos de sable de la noche del pasado domingo 12 de mayo a las puñaladas no pasaron ni 24 horas. Y es que, como en Roma, ERC no premia ni rinde pleitesía a los «traidores» -otra de las lindezas escritas por los críticos a esta junta ejecutiva de la formación que llegó con apenas 12 escaños en 2003 para subir a 23. Ahora, tras cosechar el mejor resultado de su historia, en los 33 escaños en 2021, ERC vuelve a bajar a 20 en apenas dos años.

EL DECLIVE DE JUNQUERAS Y LA POSICIÓN CÓMODA DE PUIGDEMONT

La caída es de tal calibre que ni el propio Junqueras da el paso atrás ante el temor de acabar como Ciudadanos, fuera del Parlament. Y es que, ERC no ha tocado suelo y elección tras elección han perdido casi el 50% de los votos, siendo el partido que más terreno cedió el 23-J y el segundo en escaños en este 12-M.

El cisma en ERC se produjo hace tres años, cuando Aragonès obligó a salir a Junts ante la negativa de poner en marcha un nuevo camino hacia la independencia. Desde Esquerra se negaron, no hubo oportunidad para una segunda DUI, ni tampoco baldosas amarillas para alcanzar la independencia. La palabra se convirtió en tabú, ni se pronuncia en la Generalitat ni tampoco en los mítines. «Se ha dado la espalda a las bases», afirman los críticos consultados por MONCLOA.

Corremos el riesgo de desaparecer si quienes nos han llevado aquí continúan al frente

En este sentido, apuntan que Junqueras debe desfilar como lo han hecho Aragonès y Rovira. «Es una irresponsabilidad enorme tratar de liderar un partido que te ha dado la espalda. Los indultos no funcionaron y Puigdemont va a recibir la amnistía. Corremos el riesgo de desaparecer si quienes nos han llevado aquí continúan al frente», avisan.

Por ello prometen dar la batalla y echarle por las urnas. «Ninguno de ellos puede seguir. Se han comportado como auténticos ‘botiflers’», añaden. Botiflers es el peor insulto que puede recibir un independentista. El significado es «traidor a la patria catalana». Ya se lo dijeron a Gabriel Rufián, como también a Junqueras en el pasado, pero ahora proviene de sus propias filas.

Sánchez siempre ha dado prioridad a alcanzar un acuerdo con Junts y ERC
Sánchez siempre ha dado prioridad a alcanzar un acuerdo con Junts y ERC

Con todo, ERC se presenta a su propio referéndum interno, donde Junqueras pondrá en riesgo su propio liderazgo. Será en octubre cuando se conozcan las listas, mientras habrá que esperar a noviembre para votar en el Congreso extraordinario. Los cinco meses que faltan aún será tiempo para la campaña de los críticos que amenazan el liderazgo del indultado Junqueras, mientras no se descarta que otros pesos pesados monten una alternativa más seria. El motivo es sencillo: Junqueras no puede concurrir a ningún proceso electoral hasta 2030. «Está inhabilitado. Cualquier candidato de su lista será un títere en manos de Junqueras», recuerdan.

UN INHABILITADO JUNQUERAS

El reloj no comenzará a correr hasta pasadas las elecciones europeas y está por verse si ERC tendrá representación en la circunscripción única, más cuando el voto en esas elecciones suele ser más alternativo, con candidaturas con más y mejores perspectivas. Si se quiere independencia: Junts; si se busca el pacto: PSC. ERC se ha quedado ahora en tierra de nadie, presa de su diálogo infructuoso y estéril, que no ha conseguido materializar acuerdo alguno, pese a pactarlo todo. «Ahora será Illa quien gestione esos acuerdos», afirma. «Quién va a realizar el seguimiento de esos pactos, dónde se realizará la mesa de seguimiento», prosiguen.

Y es que, la carta a la militancia de Junqueras obedecía a un movimiento estratégico, sin un objetivo claro, más allá de ganarse el respaldo en su consulta interna. Para volver, el hasta ahora líder de ERC busca el «aval explícito y renovado». Pero para ello es necesario explicar el por qué hay que entregar ese voto a una lista encabezada por Junqueras. Roger Torrent, exconsejero de Empresa con Aragonès aseguró en su día que era necesario explicar el por qué de la independencia, desde una posición moderada, crítica con el delirio actual.

Junqueras hará el mismo movimiento de Pedro Sánchez, pero la diferencia radica en que el presidente del Gobierno se enfrentó con las bases a todo el aparato socialista. «Junqueras es el aparato si se mantiene al frente de ERC». Para ello irá calle a calle, escuchando a las bases, pero éstas comienzan también a mostrar su hartazgo y no se descarta una candidatura con un firme compromiso con la independencia.

ROGER TORRENT O LOS CRÍTICOS, AL ACECHO

«ERC está muerta con Junqueras al frente. Tan solo tiene que escoger la vía para el suicidio político. Si opta por hacer presidente a Illa, acabará muerta por Junts; si hay repetición electoral, acabará muerta también por Junts y el PSC», añaden las mismas fuentes.

El cambio de rumbo hacia el autonomismo no caló en las bases y la independencia, pese a que se ha quedado en casa, sigue viva a la espera de una opción política que agarre la bandera y devuelva la ilusión. «No hay nada más erróneo que asegurar que el independentismo está derrotado. Únicamente no ha salido a votar. ¿Probamos con un referéndum?», desafían.

La guerra interna de ERC se debate en un escenario endiablado, similar al que sufrió Santa Anna en San Jacinto contra el ejército de Houston. Aquella batalla duró apenas unos minutos, pero fue encarnizada. Esquerra ahora espera apoyarse en EH Bildu, BNG y Ara Més para tratar de salvar su asiento en el Parlamento Europeo. Después, cualquier urna donde voten catalanes o el resto de España dictará sentencia.

Puigdemont, por su parte, busca su investidura con el apoyo de ERC, pero antes deberá repartirse la mesa del Parlament y el máximo dirigente deberá decidir quién tiene apoyos reales para presentarse. Illa busca la Generalitat, como Puigdemont, mientras Junqueras espera que la militancia le ubique en el sitio correspondiente. Si es o no al frente de ERC, lo conocerá en su propia consulta, pero queda muy tocado tras su tacticismo con cartas vacías de contenido y sin una postura clara.