La Reina Isabel falleció el pasado 8 de septiembre de 2022 y su partida fue una de las más sentidas a nivel global. La Reina Isabel murió a los 96 años, después de haber estado internada por varias semanas en el palacio Balmoral y, según el informe médico oficial, la causa de su deceso habría sido por “vejez”.
La partida de la Reina Isabel dejó un legado difícil de reemplazar, después de haber batido récords tras siete décadas de incansable reinado, en la que fue testigo de los cambios más significativos en la historia británica y mundial. Pero además de su importante rol en la humanidad, la Reina fue foco de diversas teorías conspiranoicas que generaron curiosidad entre los usuarios de las redes sociales. Algunos indican que su alma sigue merodeando en los rincones del Palacio, pero otros aseguran que su cuerpo reencarnó en un integrante de su familia.
El mito sobre la Reina Isabel que conmociona las redes sociales
Una vez que se anunció la partida de la Reina Isabel, comenzaron a circular diferentes mitos y rumores sobre su vida más allá de la muerte y empezaron a circular en redes sociales las más desopilantes teorías. Entre los mitos virales de la Reina Isabel, el más polémico se refiere a la posibilidad de que la monarca siga viva.
Una de las teorías conspirativas, en este sentido, asegura que Su Alteza ha sido “transmigrada” a un cuerpo joven y que su alma habita en un integrante de su familia: su nieta Lilibeth, hija del príncipe Harry y Meghan Markle. Al parecer, el cuerpo de su pequeña nieta sería el lugar donde el alma de la Reina Isabel se mantiene viva. Esta asociación se hace por el apodo que la monarca tenía cuando era pequeña (Lilith), que coincide con el nombre que Meghan Markle y Harry eligieron para su niña.
Por qué se dice que la Reina Isabel está en su nieta
Según las versiones que circulan en redes sociales, la relación entre Lilibeth y la Reina Isabel es escalofriante. Esta teoría está radicada también en la historia de amor de Harry con Meghan quien, años antes de la partida de la Reina Isabel, elige renunciar a la corona y sumarse a la élite no monárquica junto a Markle.
Un año antes de esta decisión, el 4 de junio de 2021, es cuando nace la pequeña Lilibeth que, al parecer, fue utilizada como sacrificio para utilizar ese cuerpo para la Reina Isabel. Las pruebas en las que se basa esta teoría no están actualmente comprobadas, pero estas casualidades provocaron que los fanáticos de las teorías conspiranoicas puedan asegurar que el legado de Isabel II está más vigente que nunca.
