El yoga es una de las disciplinas más practicadas en el último tiempo. La actividad del yoga tiene múltiples beneficios que generan un fuerte impacto, no sólo en el cuerpo físico sino también en la salud mental.
El yoga tiene cualidades únicas que pueden servir para reducir el estrés y la ansiedad, aumentar la calidad del sueño y dormir mejor, mejora el rendimiento académico escolar en adultos y niños, aumenta la flexibilidad, fortalece los músculos y también alivia los dolores crónicos y musculares. Entre todas estas facultades, en redes sociales también circuló una propiedad única: regular las glándulas.
La postura del yoga que puede mejorar tus glándulas
Esta disciplina posee diversas posturas que pueden contribuir a mejorar el estado físico y la calidad de vida. En redes sociales, comenzó a circular que una de las posturas podría ayudar a activar la glándula del tiroides.
Se trata de la posición de la liebre que consiste en colocar las rodillas sobre el mat, la cabeza hacia abajo y, con ambas manos, llegar al talón. Según especialistas, esta práctica se llama Yoga Hormonal y es recomendada especialmente en mujeres. Con esta especialidad, se puede trabajar con la glándula tiroides, las gónadas, las glándulas suprarrenales y la hipófisis. Este método fue creado en 1991 por la entonces brasileña Dinah Rodrigues, de 65 años, que ideó una serie de posiciones para aumentar el nivel hormonal de las mujeres.
Todo lo que tienes que saber del yoga hormonal

El yoga es un método milenario que nació en la India hace 4000 mil años. Desde sus inicios a la actualidad, esta disciplina obtuvo diferentes variantes y especialidades que contribuyen al mayor beneficio de la salud física y mental. Entre las diversas ramas de la actividad se pueden encontrar desde el Bikram (ideal para eliminar toxinas), el Aeroyoga (una práctica sobre el aire con telas para suspenderte), y otras más tradicionales como el Sivanda Yoga o el Hath.
Pero dentro de estas variedades, también se encuentra el Yoga Hormonal, que se basa en la difusión de la energía en el cuerpo y en la respiración. Es considerado un método terapéutico que trabaja con las hormonas del cuerpo para aumentar el bienestar y utiliza las posturas clásicas del yoga y la meditación. De esta manera, se pueden controlar el síndrome premenstrual, la menopausia y la infertilidad. También es recomendado para quienes tiene problemas posturales y musculares.