Organizaciones exigen al Gobierno impulsar la Ley Abolicionista de la prostitución este sábado

El pasado sábado 15 de junio, Madrid se convirtió en el epicentro del movimiento abolicionista en España con la celebración del I Congreso Abolicionista del Estado español. Organizado por la Plataforma Estatal de Organizaciones de Mujeres por la Abolición de la Prostitución (PAP) y sus organizaciones adheridas, el evento reunió a cientos de mujeres y organizaciones feministas para exigir al Gobierno la implementación de la Ley Orgánica Abolicionista del Sistema Prostitucional.

Este congreso surge en un contexto marcado por la indignación y la frustración hacia la postura del Gobierno en materia de prostitución. Las organizaciones convocantes denuncian la hipocresía del Ejecutivo al presentar una proposición de ley en el Congreso, siendo conscientes de que no sería aprobada. Acusan al Gobierno de confabulación con el proxenetismo y de connivencia con los grupos parlamentarios que, según afirman, «han demostrado su complicidad con el sistema patriarcal que, a través de la prostitución, esclaviza, violenta, agrede, asesina, mercantiliza y explota sexualmente a millones de mujeres y niñas en el mundo».

Fortaleciendo el movimiento abolicionista: unión y participación

El I Congreso Abolicionista nace con la vocación de ser un punto de encuentro para el movimiento feminista, un espacio donde organizaciones y mujeres a título individual puedan participar activamente en la lucha por la abolición de la prostitución. La respuesta a la convocatoria ha sido abrumadora, superando todas las expectativas y desbordando el aforo previsto. Este éxito de participación, con representantes de todos los territorios del Estado, demuestra la creciente concienciación social y la necesidad de fortalecer y expandir el movimiento en torno a esta reivindicación histórica.

El congreso contó con la participación de mujeres supervivientes de la prostitución, quienes compartieron sus testimonios y experiencias, poniendo rostro humano a la realidad brutal que se esconde tras la industria del sexo. Sus voces constituyen un alegato contra la explotación sexual, la violencia de género y la mercantilización del cuerpo de las mujeres, reclamando un cambio urgente en las políticas públicas que proteja a las víctimas y persiga a los proxenetas y puteros.

La lucha abolicionista en España se encuentra en un momento crucial. El I Congreso Abolicionista ha servido para visibilizar la fuerza de este movimiento y para exigir al Gobierno que asuma su responsabilidad en la erradicación de la prostitución. La aprobación de una Ley Abolicionista, que proteja a las mujeres y niñas víctimas de la explotación sexual y persiga a los responsables de este sistema de opresión, se presenta como el siguiente paso para avanzar hacia una sociedad más justa e igualitaria.