Todos sabemos que tomar agua es fundamental para la vida, sin embargo no todas las aguas son iguales y es importante elegir la adecuada para tener los beneficios que nuestro organismo requiere. Dependiendo del origen y la composición mineral pueden tener diferentes aportes para el bienestar de las personas.
Aunque no solemos prestar mucha atención a las propiedades que tiene este líquido esencial que tomamos a diario, la verdad es que este es un detalle importante al que debemos prestar atención, ya que cada una puede tener efectos diferentes en el organismo. Aquí te diremos cuáles son los diferentes tipos de agua y cómo podemos sacarles el máximo provecho para la salud.
Este es el tipo de agua que debes elegir
Seguramente en algún momento has escuchado el sobre el agua con bicarbonato y es que esta alternativa es utilizada frecuentemente para aliviar malestares estimacales. El bicarbonato de sodio es capaz de neutralizar el ácido del estómago y esto ayuda a aliviar la acidez, el reflujo gástrico y la indigestión. En este sentido, es muy recomendable tomar un poco de esta opción después de comer algún alimento irritante o cuando existe algún tipo de malestar o dolor estomacal.
Por otra parte, está esta bebida vital con sulfato que actúa como un laxante. Los sulfatos estimulan el movimiento intestinal y esto puede ayudar a combatirlo el estreñimiento, de modo que es recomendado para personas con estreñimiento. Un efecto similar produce el agua con cloruro, que actúa como un laxante leve, debido a que atrae líquido hacia los intestinos, esto ayuda a ablandar la haces y facilitar el paso. Es ideal para quienes padecen estreñimiento de forma ocasional.
El agua con magnesio también tiene grandes beneficios

El agua con magnesio es otra de las alternativas que existe. Este mineral es esencial para el funcionamien del sistema nervioso y muscular. Es importante comprender que existen diversos tipo de magnesio y cada uno tiene distintos beneficios. Por un lado el glicinato de magnesio puede ser ideal para aquellas personas que padecen insomnio o ansiedad, mientras que el citrato de magnesio combate la constipación y mejora la digestión.
Cualquiera de las opciones tiene beneficios para la salud, sin embargo es importante saber elegir la mejor para tus necesidades específicas, de esta manera podrás mejorar tu calidad de vida haciendo un ajuste muy sencillo. Recuerda siempre que debes elegir un agua de buena calidad y que haya pasado por los procesos necesarios para que sea potable y apta para el consumo humano.