La pandemia ha tenido un impacto significativo en el mercado laboral español, con altibajos en los procedimientos de regulación de empleo (ERE) a lo largo de los últimos años. Es fundamental analizar los datos de estos expedientes para comprender la evolución y las tendencias en el panorama empresarial.
Según los datos provisionales del Ministerio de Trabajo y Economía Social, el número de trabajadores afectados por despidos colectivos en abril de 2023 disminuyó un 23,3% en comparación con el mismo mes del año anterior, alcanzando un total de 2.675 empleados. Esta reducción contrasta con el aumento del 48,7% en los trabajadores afectados por procedimientos de reducción de jornada, que llegaron a 809 personas.
Variaciones en los Tipos de Expedientes de Regulación de Empleo
En abril, los trabajadores afectados por suspensiones de contrato disminuyeron un 4,7%, hasta los 10.991 empleados. Por otro lado, los trabajadores afectados por la totalidad de los procedimientos de ERE autorizados o comunicados a las autoridades laborales se redujeron un 7%, sumando 14.475 personas.
De este total, el 3,2% (464 trabajadores) se vieron afectados por procedimientos originados por causa de fuerza mayor, mientras que el 96,8% (14.011 empleados) lo estaba por procedimientos de regulación derivados de causas económicas, técnicas, organizativas y de producción (ETOP). Mientras que los primeros retrocedieron un 92,5%, los provocados por causas ETOP aumentaron un 49,1%.
Sectores y Comunidades Autónomas más Afectadas
Por sectores, el total de trabajadores afectados por todos los procedimientos retrocedió un 79,4% en el sector agrario, un 8,5% en servicios y un 7,5% en industria, mientras que avanzó un 74,8% en construcción.
En cuanto a las comunidades autónomas, Valencia fue la región que más trabajadores afectados por ERE tuvo en cifras absolutas en abril, con 5.757 trabajadores, la mayoría por suspensión de contrato. Le siguen Galicia, con 2.530 afectados; Andalucía, con 1.165 afectados y País Vasco, con 1.031.
En términos relativos, se registraron aumentos en diez comunidades y descensos en siete, principalmente en Asturias y Aragón, donde los trabajadores afectados por ERE bajaron un 98,9% y un 79,1%, respectivamente. Los mayores repuntes se dieron en La Rioja, que multiplicó casi por ocho la cifra, y Cantabria, que multiplicó por seis los trabajadores afectados.