La dudosidad hipotecaria es un tema de gran relevancia en el ámbito financiero, ya que refleja la salud y estabilidad del mercado inmobiliario y el bienestar de los hogares. En este contexto, la Asociación Hipotecaria Española (AHE) ha realizado un análisis detallado sobre la evolución de este indicador, brindando una visión alentadora sobre el horizonte de la dudosidad en el sector.
La AHE señala que el «horizonte de la dudosidad de los créditos hipotecarios no es del todo negativo», teniendo en cuenta factores clave como la evolución descendente del Euríbor, la previsión de nuevas bajadas de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) y las amortizaciones anticipadas realizadas por las familias. Estos elementos sugieren que el panorama de la dudosidad hipotecaria está adquiriendo una perspectiva más favorable.
La Estabilidad del Crédito Hipotecario de las Familias
En el crédito hipotecario de las familias para la adquisición de vivienda, la ratio de dudosidad se ha mantenido en el 2,6% durante el primer trimestre del año, manteniéndose en línea con el mínimo observado en diciembre de 2022 (2,3%). Esta estabilidad en la ratio de dudosidad se debe a varios factores clave:
La buena gestión de los hogares en sus compromisos de pago, con una contratación creciente de préstamos a tipo fijo desde 2015, ha sido un elemento fundamental. Además, la dinámica del mercado laboral, que ha posibilitado un aumento de las rentas familiares, ha contribuido a esta evolución favorable.
Las políticas de las entidades, con una gestión eficiente de riesgos tanto en las nuevas concesiones (evaluación de la capacidad de retorno del préstamo) como en los préstamos de la cartera (medidas de apoyo y venta de préstamos), han sido determinantes para mantener la estabilidad en el crédito hipotecario de las familias.
La Heterogeneidad en el Sector Inmobiliario
Mientras que el segmento de empresas y el sector inmobiliario han presentado una evolución heterogénea, la AHE destaca algunos aspectos relevantes:
Las actividades inmobiliarias han mantenido una evolución favorable y concentran la tasa de dudosidad más baja (2,8%). Por el contrario, el sector de la construcción ha evolucionado en sentido contrario, presentando la tasa más elevada del sistema (8,6%), después de que en los dos últimos trimestres los créditos dudosos aumentaran su exposición en un contexto de contracción del saldo total.
En conjunto, la AHE indica que ambas actividades (inmobiliarias y construcción) tienen un saldo dudoso de 4.063 millones de euros, que representa el 4,3% de su exposición crediticia total y se sitúa en línea con el conjunto de las actividades productivas.
En conclusión, el análisis de la AHE muestra un panorama alentador en la evolución de la dudosidad hipotecaria, con estabilidad en el crédito de las familias y una evolución heterogénea en el sector inmobiliario. Estos factores positivos, sumados a la dinámica favorable del Euríbor y las políticas de las entidades, sugieren que el horizonte de la dudosidad hipotecaria no es tan negativo como podría percibirse en un principio.






