El animal más listo de la naturaleza puede habitar en tu casa sin que lo sepas. Se trata de un animal molesto que no es inofensivo, pero que puede crear un gran sistema de defensa que nadie conoce y puede sorprender a cualquiera.
Las moscas son los insectos más frecuentes en los hogares y, de acuerdo a los expertos, son más inteligentes de lo que creemos. Entre la variedad de estos animales se distinguen tres tipos: las de la fruta, las de la madera y las domésticas y cada cual tiene un desarrollo impensado de su cerebro.
Por qué es difícil de atrapar a este animal
Las moscas domésticas son las que se pueden hallar en el hogar y las que muchas veces se intentan atrapar. Estas especies pueden poner hasta 500 huevos en sólo 3 ó 4 días y pueden transmitir hasta 65 enfermedades, como el cólera o la fiebre tifoidea. La particularidad de este animal es que poseen una gran velocidad de reacción visual con la que procesan hasta 250 imágenes por segundo.
Esta capacidad es la que la diferencia del ser humano debido a que las personas sólo pueden procesar 60 imágenes por segundo. Por este motivo es que son tan difíciles de captar. De acuerdo a los especialistas, este animal es mucho más listo de lo que se considera porque tienen conexiones neuronales implicadas en procesos de aprendizaje y memoria, que eran asociados solamente a los humanos pero que recientemente fueron descubierto en ellos.
Todo lo que no se conocía del animal más listo de todos

Según estudios nuevos de la Universidad de Cambridge, este animal tienen características humanas impensadas. La investigadora Elizabeth Barsotti y su equipo del MRC Laboratory of Molecular Biology (MRC LMB) fue quien expuso estas cualidades de las moscas de la fruta que se relacionan con el aprendizaje y la memoria. De acuerdo a lo revelado por los especialistas, estos descubrimientos pueden contribuir a la creación de nuevos sistemas de inteligencia artificial.
Estos estudios específicos se realizaron sobre las moscas de la fruta mediante un microscopio electrónico de alta resolución para obtener imágenes detalladas de cerebros animales. Esta tecnología será usada para otras especies y consta de un método innovador y revolucionario, en el que se corta el cerebro en rebanadas ultra finas y luego se inyectan con metales pesados para que se parezcan a minerales. La luz que pasa a través de estas rebanadas crea patrones complejos que los investigadores analizan para mapear las conexiones neuronales. Según los testimonios de la científica, las conclusiones sobre este animal llevaron diez años de investigación.