Las natillas caseras son un postre tradicional que nunca pasa de moda, son de ese tipo de postres que evocan la infancia y traen buenos recuerdos. Preparar unas natillas cremosas y llenas de sabor en casa es más fácil de lo que parece y aquí te explicaremos cómo hacerlo.
3Refrigera, decora y disfruta
Para evitar que se forme una capa en la superficie, cubrimos las natillas con film transparente directamente sobre la superficie y las dejamos enfriar a temperatura ambiente. Luego, las refrigeramos durante al menos dos horas antes de servir.
Al momento de servir nuestras natillas caseras, podemos espolvorear un poco de canela en polvo o ralladura de limón por encima para un toque extra de sabor. Las natillas caseras son un postre versátil que se puede disfrutar en cualquier época del año, ya sea solo o acompañado de galletas, frutas frescas o incluso un trozo de bizcocho.
Con estos sencillos pasos, puedes preparar en casa unas natillas caseras que rivalizan con las mejores de cualquier restaurante. Experimenta con diferentes sabores y presentaciones para hacer de este clásico postre un favorito en tu mesa. Disfruta del placer de lo casero con unas natillas que derretirán corazones en cada cucharada.
