El Aita Mari salva a 34 náufragos en el Mediterráneo, principalmente sirios en busca de refugio

En una ardua operación llevada a cabo en la madrugada, el barco de rescate Aita Mari ha logrado rescatar a 34 personas que se encontraban en grave peligro en el Mediterráneo. Este grupo heterogéneo incluye a dos mujeres, una de ellas embarazada de 7 meses, y tres menores de edad, todos ellos procedentes en su mayoría de Siria.

La acción humanitaria se vio complicada por la aparición de tres embarcaciones libias con tripulantes encapuchados y armados, lo que generó momentos de tensión durante el rescate. Sin embargo, el equipo del Aita Mari logró estabilizar la situación y proceder con éxito a la evacuación de las personas en riesgo.

Operación de Rescate bajo Situación Crítica

La operación de rescate se inició en la madrugada, cuando la tripulación del Aita Mari observó cómo tres embarcaciones libias, algunas con personas enmascaradas y armadas, se acercaban a la embarcación en peligro. Esto provocó confusión y tensión en el momento crucial del rescate, llegando incluso a que una persona se arrojara al agua.

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Tras lograr estabilizar la situación y recuperar a la persona que había saltado al mar, el capitán del Aita Mari ordenó continuar con la evacuación de los refugiados. Una de las embarcaciones libias se retiró, mientras que las otras dos permanecieron observando en la zona.

Al finalizar el rescate, hombres de uno de los barcos libios restantes, «en medio de la oscuridad y sin luces«, abordaron por sorpresa la embarcación ya vacía en la que viajaban las personas en busca de refugio, arrancaron el motor y se la llevaron. Según la ONG Salvamento Marítimo Humanitario (SMH), esta es una práctica cada vez más común de las mafias para recuperar las embarcaciones utilizadas en estos traslados.

Llegada a Puerto Seguro y Llamado a la Acción

Una vez finalizada la operación de rescate, el Aita Mari recibirá instrucciones del Gobierno italiano para desembarcar en el puerto de Ravenna, siguiendo la política de alejar los barcos de rescate de una de las rutas marítimas más mortíferas del mundo.

Desde SMH, se ha vuelto a exigir a los gobiernos europeos que habiliten vías legales y seguras para quienes buscan asilo en Europa o se ven obligados a salir de sus países, con el fin de que «no tengan que poner en riesgos sus vidas en el mar o en otras rutas en las que se vulneran los derechos humanos más básicos.

Asimismo, se ha criticado el papel de los guardacostas libios, financiados por Europa, que deberían facilitar y no poner en riesgo las operaciones de rescate, las cuales son de obligado cumplimiento para los países ribereños.

En total, el Aita Mari ha logrado rescatar a 34 personas que huían de Libia, con orígenes diversos que incluyen Egipto, Nigeria, Bangladesh y, sobre todo, Siria. Entre ellos se encuentran dos mujeres, una de ellas embarazada de 7 meses que viaja con su hermano de 14 años, y otros dos menores. Todas las personas rescatadas se encuentran bien tras esta peligrosa travesía.

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