Desde el lunes pasado, tropas de China han estado participando en ejercicios militares en Bielorrusia, en un movimiento que ha levantado preocupaciones en la Unión Europea y en Ucrania.
Aunque ambos gobiernos presentan estas maniobras como un simple acto de cooperación entre aliados, el mensaje para Occidente es claro.

Un análisis del grupo mediático Groupe Centre-France sugiere que estas maniobras, denominadas «Ataque del Águila», coinciden provocativamente con el 75º aniversario de la OTAN.
Los ejercicios se están llevando a cabo en Brest, a solo cinco kilómetros de la frontera polaca, lo que subraya la proximidad a la OTAN y la Unión Europea.
Este desarrollo ocurre en un contexto de alta tensión, especialmente durante la reciente cumbre de la OTAN en Washington, donde los líderes occidentales reafirmaron su apoyo a Ucrania.
El análisis destaca que estas maniobras representan una escalada significativa en la región, insinuando el espectro de una posible Tercera Guerra Mundial. La incertidumbre sobre las acciones futuras de Rusia, especialmente en relación con los países miembros de la OTAN, añade una capa de riesgo.
En respuesta a estas maniobras y a otras tensiones, Polonia ha incrementado las restricciones en su frontera con Bielorrusia.

Desde el miércoles, Varsovia ha prohibido la entrada de vehículos pesados procedentes de Bielorrusia, causando largas colas y perturbaciones en el tráfico. Además, hay temores de que Polonia pueda cerrar el tráfico ferroviario entre ambos países, exacerbando la situación.
La ciudad polaca de Małaszewicze, un importante nudo ferroviario que maneja un gran volumen de tráfico de contenedores, se ve particularmente afectada. La presión de China sobre Bielorrusia para resolver estas tensiones es significativa, ya que Bielorrusia depende en gran medida de las inversiones chinas.
Mientras tanto, los ciudadanos bielorrusos enfrentan dificultades adicionales para cruzar a Polonia, con largas esperas y controles estrictos en el cruce de Terespol-Brest. Polonia ha acusado a Bielorrusia de fomentar una «guerra híbrida» al facilitar la migración ilegal masiva hacia su territorio, una acusación que Minsk niega.
1Tensiones por parte de China

En respuesta a estas tensiones, Polonia ha incrementado su presencia militar en la frontera, destacando 2,000 soldados adicionales y planificando la creación de un cuerpo de reservistas listo para actuar rápidamente. Los líderes de Polonia, Estonia, Letonia y Lituania han solicitado a la Unión Europea medidas extraordinarias para fortalecer la defensa en la frontera con Bielorrusia.
El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Polonia, el General Wieslaw Kukula, subrayó la necesidad de prepararse para un conflicto a gran escala. Estas maniobras militares conjuntas y las tensiones fronterizas resaltan la creciente complejidad y volatilidad en la región, con implicaciones potencialmente serias para la seguridad europea.