Cuando estamos enfocados en llevar un estilo de vida saludable, es fundamental conocer opciones de proteínas saludables y el jamón de york y de pavo han sido alternativas muy comentadas durante años. Sin embargo, la verdad es que existe otra opción mucho más nutritiva y económica para incluir en la alimentación y cumplir con esos porcentajes de proteínas que tanto requerimos.
La sardina es un pequeño pescado azul que es considerado una joya dentro de las proteínas, de modo que muchos nutricionistas la recomiendan para incluir en cualquiera de las comidas principales, debido a que es rico en grasas saludables y aporta una buena cantidad de proteína al organismo. Aquí te hablaremos de los beneficios de este delicioso pescado.
¿Por qué elegir sardina en lugar de jamón york o de pavo?

Aunque el jamón york y pavo tienen grandes beneficios al momento de preparar alimentos saludables, la sardina tiene aportes mucho más recomendados por los especialistas. Una lata de 125 g de sardina puede aportar cerca de 23, esto representa el 46% del valor diario recomendado para un adulto. Además, la sardina es una proteína completa que contiene todos los aminoácidos esenciales para que el organismo funcione adecuadamente y, por si esto fuera poco, se trata de un alimento de fácil digestión.
Pero los niveles de proteína no son los únicos beneficios que trae la sardina. Este pescado es uno de los más recomendados para obtener la cantidad de ácidos grasos omega-3 recomendados, esta propiedad puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares e inflamación. También, es un alimento rico en vitamina D, qué es esencial para la salud ósea y el sistema inmunológico. La vitamina B12 es otro de los nutrientes presentes en este alimento, por lo que es ideal para prevenir anemia y proteger al sistema nervioso.
¿Cómo comer sardina en lugar de jamón york o pavo?

Si hay algo que las personas aman del jamón york o pavo es la versatilidad que estos alimentos tienen para prepararlos en diferentes platillos, pero la verdad es que la sardina también puede consumirse de diversas maneras. Muchas personas eligen comprar las sardinas enlatadas, lo cual es una opción muy práctica y cómoda para preparar ensaladas, sándwiches o pastas.
Ahora bien, los especialistas de la salud recomiendan comer las sardinas frescas, las cuales también pueden cocinarse a la plancha al horno y de muchas otras maneras. De cualquier forma, este alimento sano es una excelente alternativa para tener una buena nutrición y la cantidad de proteínas necesarias en una comida.