Lavar el cabello es una parte fundamental del cuidado de nuestra melena, pero existe mucho debate sobre la frecuencia con la que este aseo debe cumplirse. Sin embargo, los dermatólogos tienen la respuesta ideal para saber cuántas veces a la semana debemos seguir nuestra rutina de champú y limpieza de pelo sin generar un daño en el cuero cabelludo.
A través de las redes sociales, muchas personas emiten su opinión acerca de la manera correcta en la que se debe lavar el pelo y con qué frecuencia debemos hacerlo. La realidad es que esto puede variar de persona en persona, de modo que los dermatólogos tienen algunos puntos que aclarar al respecto para evitar un mal cuidado de la melena.
Esta es la frecuencia ideal para lavar el cabello, según los dermatólogos
Aunque no existe una cantidad exacta de lavados por semana, los dermatólogos sí tienen algunas medidas estándar que puede servir como guía para la mayoría de las personas. Los especialistas afirman que este tipo de limpieza con champú debe realizarse de dos a tres veces por semanas en personas con cabello normal y esto se debe a que el cuero cabelludo produce aceites naturales que mantienen la hidratación, pero lavarlo con demasiada frecuencia puede eliminarlos en exceso, lo que genera sequedad y fragilidad.
En el caso de las personas con cabello graso, la frecuencia de lavado debe ser de tres a cuatro veces por semana, debido a que el cuero cabelludo produce mayor cantidad de aceites y esto puede generar una apariencia sucia. Ahora bien, en las personas con cabello seco, la frecuencia de lavado puede ser de una a dos veces por semana, pues este tipo de pelo es más propenso a la deshidratación y rotura, por lo que ese recomienda dejar que los aceites naturales actúen.
Otras recomendaciones de los dermatólogos para lavar el cabello
Además de cuidar la frecuencia con la que lavamos el pelo, los dermatólogos también tienen otras recomendaciones importantes. Es necesario evitar el agua caliente al momento de lavar el pelo, pues puede resecar el cuero cabelludo y generar diversos problemas, en este sentido, lo mejor es usar agua tibia o fría.
Por otra parte, es fundamental elegir el champú y acondicionador adecuados a las necesidades que el tipo de cabello posee. Igualmente, es recomendable masajear el cuero cabelludo para estimular la circulación sanguínea, lo cual mejora la absorción de nutrientes y promueve el crecimiento. Finalmente, es ideal cortar las puntas abiertas regularmente para evitar que el daño se extienda por todo el pelo.
