La ensalada de pasta de colores es una opción deliciosa y práctica para llevar a la oficina. Utilizando fusilli o farfalle, esta receta combina la frescura de los tomates cherry de colores y la suavidad del queso fresco, creando un platillo no solo visualmente atractivo, sino también nutritivo y satisfactorio. La preparación es sencilla y los ingredientes son accesibles, lo que hace de esta ensalada una excelente elección para cualquier día de la semana.
Para comenzar con la ensalada de pasta, cocina 400 gramos de fusilli en una cazuela con abundante agua y sal. Asegúrate de que la pasta quede al dente, ya que esto ayudará a mantener su textura en la ensalada. Una vez cocida, escurre bien la pasta y colócala en una ensaladera, sazonándola ligeramente con un poco de aceite de oliva. Este paso es crucial para que la pasta no se pegue y conserve su sabor.
Ingredientes para la ensalada de pasta

Mientras la pasta se enfría, prepara la pechuga de pollo. Salpimienta 650 gramos de pechuga y rehoga dos dientes de ajo en una sartén con tres cucharadas de aceite de oliva. Retira los ajos una vez dorados e incorpora el pollo, dorándolo por ambos lados antes de tapar la sartén y dejarlo cocinar a fuego medio por unos 10 minutos cada lado. Este método asegura que la pechuga esté bien cocida y jugosa, lista para ser parte de la ensalada de pasta.
Mientras el pollo se cocina, corta 250 gramos de queso fresco en dados y lava 300 gramos de tomates cherry de colores. Para una ensalada de pasta más vistosa, corta los tomates por la mitad y agrega 100 gramos de berros o canónigos, que aportan un toque fresco y crujiente. Estos ingredientes no solo añaden color y textura, sino que también enriquecen el perfil nutricional del plato.
El toque final, antes de servir

Una vez que el pollo esté listo y templado, córtalo en rodajas gruesas. Esto facilita su incorporación en la ensalada de pasta, permitiendo que cada bocado tenga una buena proporción de ingredientes. Monta la ensalada mezclando la pasta con los dados de queso, los tomates cherry y los berros. Añade las rodajas de pollo encima, asegurándote de distribuir todo de manera uniforme para que cada porción sea equilibrada y sabrosa.
Finalmente, para darle el toque final a tu ensalada de pasta, aliña con un poco más de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto. Decora con una ramita de tomillo limonero, que no solo añade un aroma fresco y cítrico, sino que también mejora la presentación del plato. Esta ensalada se puede preparar con antelación y es ideal para llevar a la oficina, ya que se conserva bien en un recipiente hermético y se puede disfrutar fría o a temperatura ambiente.