Ir al baño es una necesidad fisiológica que todas las personas realizan cada día y es indispensable para la eliminación de desechos del cuerpo. Sin embargo, si hay algo que se ha cuestionado en los últimos años es la postura y técnica que la mayoría utiliza al momento de evacuar. Esto es un factor fundamental que tiene un impacto importante en la salud digestiva y en el bienestar.
Todos pueden sentirse muy identificados con un proceso de evacuación en el que estén sentados en el inodoro. Sin embargo, los expertos han aclarado que esta posición no es la más natural para defecar. Pese a que muchos la pueden considerar cómoda, lo es cierto es que puede interferir en la evacuación adecuada.
¿Por qué la postura es importante al momento de ir al baño?

Muchas personas presentan problemas al momento de ir al baño y esto se debe a que la posición utilizada en el inodoro occidental genera que el reto se pliegue en un ángulo, lo cual dificulta la salida de heces y puede generar mayor esfuerzo, estreñimiento y hasta hemorroides. En este sentido, la postura recomendada para optimizar la depuración y mejorar la salud digestiva es la posición de cuclillas. De hecho, Esta es la posición más utilizada por diversas culturas ancestralmente.
La posición de cuclillas ayuda a lograr una alineación del recto y facilita la salida de heces sin necesidad de realizar un esfuerzo excesivo. Esto previene diversos problemas de salud digestiva y mejora la depuración de desechos. Ahora bien, ¿cómo podemos mejorar la postura en el hinodoro? En los baños occidentales actuales no es posible adquirir una posición de cuclillas, de modo que debemos optar por algunas estrategias que nos ayuden.
Cómo mejorar la postura para ir al baño

Tener una mejor posición al momento de ir al baño es posible. Solo necesitarás un taburete que esté ubicado frente al inodoro, de modo que puedas posar tus piernas en este y tus rodillas se mantengan elevadas por encima de las caderas. Este truco bastará para mejorar la salud digestiva y facilitar la evacuación. Aunque se trate de una práctica muy sencilla, puede representar una gran mejora.
Este cambio en tu postura puede tener muchos beneficios para la salud. Además es facilitar la evacuación completa de heces, disminuye el riesgo de estreñimiento y hemorroides, fortalece los músculos del suelo pélvico y representa una mejoría para la salud en general. Si tienes problemas para evacuar, también es importante cuidar la hidratación, llevar una dieta rica en fibra, evitar los distractores dentro del baño y en su parte en la respiración.