Las galletas de limón son una opción deliciosa y rápida para una merienda perfecta. Con un sabor cítrico refrescante y una textura suave, estas galletas se pueden preparar en solo 10 minutos, lo que las convierte en una solución ideal para cualquier antojo de último minuto. La combinación de ingredientes simples y el proceso de preparación fácil garantizan un resultado espectacular sin necesidad de ser un experto en la cocina.
Para hacer estas galletas de limón, necesitarás ingredientes básicos que probablemente ya tengas en tu despensa. Estos incluyen una cucharada de esencia de vainilla, 125 gramos de harina, una pizca de polvo de hornear, una cucharada de ralladura de cáscara de limón, 75 gramos de azúcar y un huevo. Lo primero que debes hacer es batir el huevo junto con la vainilla y el azúcar en un tazón grande hasta obtener una mezcla cremosa pero líquida. Este paso es crucial para garantizar que el azúcar se disuelva completamente y se integre bien con el huevo.
Cómo hacer unas galletas de limón

El siguiente paso en la preparación de las galletas de limón es añadir la harina y el polvo de hornear a la mezcla de huevo. Es importante hacerlo poco a poco para evitar grumos y asegurarse de que todo esté bien incorporado. Si prefieres, puedes usar harina leudante en lugar de harina normal y polvo de hornear para obtener una textura más esponjosa en las galletas. Una vez mezclados todos los ingredientes, deja reposar la masa durante unos minutos. Si la masa está demasiado pegajosa, añade un poco más de harina hasta que tenga una consistencia manejable.
Una vez que la masa de las galletas de limón esté lista, es momento de agregar la ralladura de limón. Este ingrediente le da a las galletas su característico sabor cítrico y aroma refrescante. Integra bien la ralladura en la masa y luego prepara una bandeja para hornear colocando papel para hornear o espolvoreando un poco de harina si no tienes papel. Coloca cucharadas de masa en la bandeja, asegurándote de dejar espacio suficiente entre cada una para que las galletas no se peguen al hornearse.
Hornear por 10 minutos y dejar enfriar

Hornea las galletas de limón en un horno precalentado a 180 °C durante aproximadamente 10 minutos. Es importante no sobrecocerlas para que mantengan su textura suave y ligeramente esponjosa. Una vez horneadas, deja que las galletas se enfríen durante unos minutos en la bandeja antes de transferirlas a una rejilla para que se enfríen completamente. Esto también ayuda a que se asienten y mantengan su forma.
Servir las galletas de limón es una experiencia deliciosa. Puedes acompañarlas con un batido de chocolate o una taza de té para una merienda perfecta. Además, si quieres darle un toque especial, puedes usar moldes para darles formas originales y atractivas, especialmente si las preparas para una ocasión especial o para sorprender a los más pequeños de la casa. Estas galletas no solo son rápidas y fáciles de hacer, sino que también son increíblemente versátiles y deliciosas.