Vivendi, el conglomerado francés de ocio y comunicación, está dando un paso significativo hacia la reestructuración de su negocio audiovisual. Este análisis nos sumerge en las futuras operaciones de Canal+, Havas y la nueva entidad Louis Hachette Group, las cuales se preparan para cotizar en diferentes mercados bursátiles. Este movimiento no solo busca fortalecer su presencia en el ámbito internacional, sino también capitalizar sobre el crecimiento de la industria del entretenimiento en un contexto global cambiante.
La estrategia presentada por Vivendi incluye la oferta pública de adquisición de la sudafricana MultiChoice, lo que demuestra su ambición de expandir su influencia en el continente africano. Con una cotización prevista en la Bolsa de Londres para Canal+, y en Euronext Ámsterdam para Havas, la multinacional reafirma su compromiso de seguir desarrollando su capacidad creativa mientras mantiene su sede operativa en Francia. La decisión sobre la escisión y los detalles formales se someterán a la aprobación de una junta extraordinaria de accionistas, programada para finales de 2024.
VIVENDI Y SU ESTRATEGIA DE COTIZACIÓN EN EL MERCADO INTERNACIONAL
La elección de las bolsas de valores donde Viviendi planea cotizar sus filiales refleja una clara estrategia de diversificación y expansión. Canal+ buscará establecerse en la Bolsa de Londres, un movimiento que pretende resaltar su dimensión internacional. Con esta cotización, la empresa no solo obtendrá un mayor acceso a capital, sino que también elevará su perfil en el panorama mediático global, permitiendo atraer inversores que buscan oportunidades en el sector audiovisual de alto crecimiento.
Por su parte, Havas, ahora en vías de convertirse en una sociedad anónima, tendrá su lugar en Euronext Ámsterdam. Esta decisión subraya la importancia de la publicidad y las comunicaciones en el conglomerado, y cómo Vivendi aprecia el entorno regulatorio favorable que ofrece la bolsa holandesa. La cotización en Ámsterdam permitirá a Havas consolidar su presencia en Europa y aprovechar el crecimiento en el sector de la publicidad digital, un área que se encuentra en constante evolución y que ofrece un amplio margen de crecimiento.
A su vez, la nueva entidad Louis Hachette Group se planea para operar en Euronext Growth, el mercado destinado a empresas en crecimiento y pequeñas y medianas empresas. Al agrupar activos valiosos en edición y distribución, Vivendi pretende que esta nueva sociedad se convierta en un bastión para expandir sus operaciones editoriales y capitalizar en las tendencias de consumo de medios, que cada vez son más digitales y menos tradicionales.
MANTENIMIENTO DE CENTROS OPERATIVOS Y DECISIÓN FISCAL EN FRANCIA
A pesar de la decisión de cotizar en mercados bursátiles fuera de Francia, Vivendi enfatiza que estas tres nuevas entidades mantendrán sus centros de toma de decisiones y equipos operativos ubicados en Francia. Este enfoque no solo permite a la empresa beneficiarse de la atractiva fiscalidad y del ambiente creativo de su país de origen, sino que también asegura que puedan mantener el control de sus operaciones sobre un eje estratégico en Europa, algo vital en un sector como el entretenimiento.
Además, Vivendi ha declarado que estas empresas seguirán siendo consideradas residentes fiscales en Francia para efectos del impuesto sobre sociedades. Esto representa un matiz importante que refleja la intención de la compañía de minimizar cualquier impacto negativo derivado de su expansión internacional. Sin embargo, la empresa ha advertido que los detalles sobre las cuestiones fiscales están aún bajo estudio, lo que indica que se están explorando las mejores alternativas para asegurar el éxito de esta transición.
El proceso de información y consulta con los representantes de los trabajadores es un paso fundamental que Vivendi ha decidido emprender. A través de este mecanismo, la empresa buscará proporcionar claridad e involucrar a los empleados en este cambio significativo. Asimismo, los debates con los reguladores fiscales y bursátiles son indicativos de la seriedad con la que Vivendi aborda esta reestructuración y demuestran su compromiso por operar dentro de un marco legal claro y eficiente.
VISIÓN A FUTURO: OPORTUNIDADES Y DESAFÍOS EN LA ESCISIÓN
El proyecto de escisión de Vivendi es una jugada estratégica que busca definir claramente las áreas de negocio y maximizar el valor para sus accionistas. Con la asignación de acciones de las nuevas empresas vinculadas, se espera que el grupo Bolloré, a través de sus participaciones, mantenga un fuerte control sobre las entidades resultantes. Este control le permitirá seguir influyendo en la dirección de las operaciones, a la vez que entrega un valor tangible a los accionistas actuales.
Una vez completada la escisión, se anticipa que Vivendi mantenga una participación considerable en el capital y los derechos de voto de Canal+, Havas y Louis Hachette Group. Este enfoque estratégico no solo beneficiará a las empresas separadas, sino que también permitirá a Vivendi continuar su trayectoria como un actor clave en el sector del entretenimiento y las industrias creativas, gestionando activos como Universal Music Group.
Sin embargo, la implementación de esta escisión no está exenta de desafíos. Las incertidumbres fiscales y el entorno competitivo del mercado requieren que Vivendi navegue con cuidado. La compañía deberá mantenerse alerta y lista para adaptarse a cualquier cambio en las dinámicas del mercado que pudieran afectar sus planes a corto y largo plazo. Con una visión clara y una estrategia bien fundamentada, Vivendi tiene el potencial para consolidarse aún más como un líder en el sector audiovisual global, enfrentando tanto las oportunidades como los desafíos que se presenten en el camino.