La Comunidad de Madrid se ha visto enfrentada a un importante aumento en la llegada de menores extranjeros no acompañados (menas) a su territorio. En lo que llevamos de año 2023, han atendido a más de 1.400 de estos menores, frente a los 1.300 de todo el año 2022.
Esta situación ha generado una gran preocupación en el Gobierno regional, que considera que el Gobierno central no está ejerciendo adecuadamente sus competencias en materia migratoria. El consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García Martín, ha criticado duramente la falta de control de las fronteras y de coordinación entre las distintas administraciones públicas para hacer frente a este desafío.
La Respuesta del Gobierno de la Comunidad de Madrid
García Martín ha exigido al Gobierno central que cumpla con sus responsabilidades en el control de las fronteras y la gestión de los flujos migratorios, en lugar de trasladar el problema a las comunidades autónomas. Según el consejero, la Comunidad de Madrid se ha visto obligada a asumir la atención de estos menores no acompañados con sus propios recursos, que se encuentran saturados.
Asimismo, el consejero ha criticado la falta de coordinación entre el Gobierno central y las comunidades autónomas, así como la ausencia de una financiación adecuada para hacer frente a esta situación. Considera que el Gobierno de Pedro Sánchez está ninguneando a las comunidades autónomas y no les está proporcionando la información y los datos necesarios para desarrollar políticas efectivas.
La Necesidad de un Enfoque Integral y Coordinado
Para García Martín, la solución pasa por que el Gobierno central asuma el control de las fronteras y la coordinación de las políticas migratorias con las comunidades autónomas. Esto incluiría la celebración de una conferencia de presidentes y una conferencia sectorial para abordar este problema de Estado de manera integral y con financiación suficiente.
El consejero ha manifestado su preocupación por la descoordinación y el descontrol que, a su juicio, caracterizan la gestión migratoria del Gobierno de Pedro Sánchez. En este sentido, ha criticado que el Ejecutivo central esté más preocupado por «la situación de Begoña Gómez y del propio presidente» que por ejercer sus competencias y controlar las fronteras.
En resumen, la Comunidad de Madrid se enfrenta a un reto migratorio sin precedentes, que requiere de una respuesta coordinada y efectiva por parte de todas las administraciones públicas, con el Gobierno central a la cabeza. Solo así se podrá hacer frente a esta situación de manera adecuada y garantizar el bienestar de los menores extranjeros no acompañados que llegan a la región.