La operadora de telecomunicaciones estadounidense AT&T ha presentado resultados del segundo trimestre del año, mostrando una imagen mixta. Por un lado, la compañía registró un descenso del 20% en su beneficio neto atribuido, que alcanzó los 3.546 millones de dólares (3.263 millones de euros). Sin embargo, los datos también revelan signos de estabilidad y crecimiento en otras áreas clave del negocio.
La facturación operativa de AT&T se situó en 29.797 millones de dólares (27.416 millones de euros), lo que representa una leve disminución del 0,4% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este resultado se explica, en parte, por un incremento del 0,6% en los ingresos por servicios, que sumaron 25.006 millones de dólares (23.008 millones de euros), mientras que las ventas de equipos registraron un descenso del 5,4%, hasta los 4.791 millones de dólares (4.408 millones de euros).
Consolidación de la Base de Clientes y Reducción de Cancelaciones
Uno de los aspectos más destacados del trimestre fue el aumento de 419.000 nuevos suscriptores telefónicos mensuales, lo que supone el primer crecimiento interanual en ocho trimestres. Además, la compañía logró reducir el porcentaje de clientes que cancelan su servicio mensualmente al 0,7%.
Estos resultados positivos en la captación y retención de clientes reflejan los esfuerzos de AT&T por reposicionar y fortalecer su presencia en el mercado de las telecomunicaciones. Según el consejero delegado de la compañía, John Stankey, el sólido desempeño del trimestre demuestra los beneficios duraderos de la estrategia de inversión y reposicionamiento de la empresa.
Perspectivas de Crecimiento y Adaptación al Mercado
A pesar de la disminución del beneficio neto en el segundo trimestre, los ingresos operativos de AT&T sumaron 59.825 millones de dólares (55.046 millones de euros) en la primera mitad del año, lo que representa un descenso del 0,4% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Sin embargo, la facturación por servicios registró un incremento del 0,8%, hasta los 49.848 millones de dólares (45.866 millones de euros).
Estos resultados mixtos evidencian la capacidad de adaptación de AT&T en un entorno de mercado desafiante, donde la competencia y la evolución tecnológica plantean constantes retos. La estrategia de inversión y el **enfoque en la *captación y retención de clientes* parecen estar dando frutos, lo que augura perspectivas de crecimiento a medio y largo plazo para la operadora estadounidense.